La tregua parcial entre talibanes y tropas estadounidenses seguía siendo respetada este viernes, por séptimo día consecutivo, en la víspera de la firma del acuerdo en Doha entre Washington y los rebeldes.
Según Nasrat Rahimi, el portavoz del ministerio de Interior afgano, se produjeron dos ataques de los talibanes contra el ejército y la policía en Kapisa y Laghman, dos provincias fronterizas con la provincia de Kabul.
Un artefacto artesanal estalló también en Badajshan (norte), al paso de fuerzas progubernamentales. Esos tres incidentes causaron en total un muerto y tres heridos, declaró Rahimi a la AFP.
La tregua parcial arrancó el 22 de febrero en Afganistán y fue presentada por Washington como un requisito previo a la firma el sábado de un acuerdo entre Estados Unidos y los talibanes en Doha.
Esta disminución de los combates sirvió para demostrar la buena voluntad de los talibanes y sobre todo, su capacidad de controlar las tropas sobre el terreno.
El acuerdo que debe ser firmado el sábado tiene como objetivo una retirada gradual de las tropas estadounidenses en Afganistán, a cambio de garantías de seguridad de los insurgentes.