La movilización social contra la reforma de las pensiones en Francia, entró este viernes en su vigésimo tercer día, convirtiéndose en la acción de este tipo más larga desde las huelgas de 1995.
El próximo fin de semana, en el que se prevén múltiples desplazamientos por las fiestas de fin de año, seguirá estando «muy perturbado» en los transportes públicos debido a la huelga parcial en el operador ferroviario SNCF, en especial de los maquinistas, aunque el índice de huelguistas ha disminuido.
En París, seguían cerradas este viernes cinco de las 16 líneas del metro de la capital, pero en los últimos días llegaron a cerrar todas, salvo las dos automatizadas.
Philippe Martinez, secretario general del sindicato CGT, volvió a exigir este viernes que el gobierno retire su proyecto de reforma.
El gobierno quiere fusionar en un sistema único los 42 planes de jubilación distintos que a veces marcan edades diferentes de retiro tomando en cuenta las especificidades de diferentes profesiones como pueden ser bailarines de ballet, conductores de trenes, pilotos de avión, policías o bomberos.
La protesta superó este viernes la duración de la gigantesca huelga de transportes de noviembre y diciembre de 1995, también desatada por un intento gubernamental de reformar el sistema jubilatorio y que finalmente fue retirado.
Se esperan varias manifestaciones este sábado en toda Francia. Las movilizaciones proseguirán la semana próxima.
Contrariamente al deseo del presidente Emmanuel Macron, los sindicatos se negaron a una tregua navideña y se han mantenido las protestas.
El 9 de enero los sindicatos prevén una nueva jornada de masivas manifestaciones y huelgas interprofesionales. AFP