Por si los tiempos no eran ya de por sí apurados para Pedro Sánchez, el PSOE tendrá que acelerar aún más. El debate de investidura en el Congreso se adelantará un día, en concreto, empezará el martes 1 de marzo en lugar del día 2; por lo que la votación también se producirá un día antes de lo previsto: pasa de ser el jueves a celebrarse el miércoles 2 de marzo.
Pese a esta modificación de fechas, ahora mismo la polémica se concentra en el horario que se ha elegido para la intervención de Sánchez, a las 16.00 horas, y que ha provocado una gran bronca del día en el Congreso, ya que el martes sólo hablará él. PP y Podemos denuncian que es un «monólogo» a «mayor gloria» del líder socialista y un «inmenso teatro de márketing» a su favor.
El repentino cambio, propuesto por el presidente del Congreso, Patxi López, viene provocado por los posibles problemas con los plazos legales sobre cuándo se tendrían que repetir las elecciones, que en lugar del domingo 26 de junio podría llevar los comicios al lunes 27, en un día laborable, una circunstancia sobre la que no hay precedentes. Así la primera votación tendrá lugar el 2 de marzo (en la que necesita una mayoría absoluta que hoy no tiene). Para garantizar el margen obligatorio de 48 horas entre votaciones, la segunda, donde ya le bastaría a Sánchez con obtener mayoría simple, se mantiene para el sábado 5 de marzo, como estaba previsto, ante la no descabellada posibilidad de que la primera votación sea a altas horas de la noche.
La idea de López es que Sánchez defienda su investidura en una sesión que comience a las 16.00 horas, pero este horario está provocando un importante enfado en el Congreso. El PP y Podemos rechazan de plano esa hora y exigen que el debate se inicie por la mañana, para que no acapare todo el protagonismo y también puedan intervenir los líderes de las principales fuerzas.
El portavoz del PP, Rafael Hernando, ha sido durísimo con López en rueda de prensa, denunciando que está actuando «al servicio» de Sánchez y que ha fijado un horario para «mayor gloria» del candidato socialista, «trampeando» y saltándose «a la torera» los reglamentos para que monopolice todo el protagonismo de los medios de comunicación.
Abundando en ese tono crítico, Hernando ha reprochado a López que utilice la Cámara «como un instrumentillo más de Ferraz» para convertir el debate de un «show room» de Sánchez, en un uso «indecente» de sus prerrogativas como presidente del Congreso.
También ha disparado contra Ciudadanos, el único partido de la Junta de Portavoces que ha respaldado el horario establecido por López. Según ha explicado Hernando, el partido de Rivera habría saludado que su intervención fuese a coincidir con el horario de los informativos. «La democracia no se organzia según los telediarios, sino según las reglas», ha recriminado el portavoz del PP.
Desde Podemos, Íñigo Errejón ha denunciado que se haya elegido un horario para celebrar un «inmenso teatro de márketing» utilizando el hemiciclo para que Sánchez dé «un mitin de precampaña», de cara a una hipotética repetición de las elección.
El portavoz de Podemos ha subrayado su «perplejidad» porque se organice un debate «en diferido» sin que «nadie» pueda replicar al líder del PSOE. Asimismo, ha llamado la atención de que sólo Ciudadanos haya respaldado la decisión en la Junta de Portavoces. «Nos nos parece casualidad», ha dicho, «ni sano».
Alvajo Carvajal/El Mundo