El precandidato republicano a la Presidencia Jeb Bush consideró hoy que la visita a La Habana del secretario de Estado, John Kerry, es un símbolo del consentimiento de la Administración de Barack Obama a las políticas del régimen castrista y un “regalo de cumpleaños” para Fidel Castro.
La visita del secretario de Estado John Kerry a La Habana es un regalo de cumpleaños para Fidel Castro. Un símbolo de la aquiescencia del Gobierno de Obama a su legado despiadado”, dijo el exgobernador de Florida en un comunicado.
Kerry viajó hoy a Cuba para izar la bandera estadounidense en la embajada en La Habana, en la primera visita de un secretario de estado de EE.UU. a la isla desde 1945.
Fidel Castro, líder de la revolución cubana, que celebró este jueves su 89 cumpleaños, escribió un artículo en la víspera en el que reclamó a EE.UU. millonarias indemnizaciones por los daños causados por las sanciones y el embargo a Cuba aun vigente.
En opinión de Bush, la “política de EE.UU. ha cambiado, pero no la de Cuba”, cuyo régimen sigue siendo una “dictadura inflexible” y un ejemplo de la “locura del comunismo”.
Bush consideró que esta “reconciliación” se hace a “expensas de la libertad y la democracia que todos los cubanos merecen”, por lo que la presencia de Kerry en la isla es “especialmente insultante” para la disidencia.
“Que los valientes cubanos cuyo único delito es pedir libertad y democracia estén lejos de la ceremonia de apertura oficial de la Embajada de Estados Unidos es otra concesión a los Castro”, opinó.
Por ello, el republicano señaló que es necesario un presidente que trabaje en “solidaridad” con un pueblo cubano libre y dijo que si llega a la Casa Blanca tras las elecciones de 2016 revertirá la estrategia de reconciliación y ayudará al “pueblo cubano a reclamar su libertad y determinar su futuro, libre de la tiranía”.
Bush indicó que el “principio” de la política de EE.UU. hacia Cuba debe ser la defensa de los “derechos humanos fundamentales y los valores democráticos”.