La ministra de Igualdad y número dos de Podemos, Irene Montero, ha lamentado el «veto injusto» a su presencia en las listas de Sumar, un veto que la líder de esta coalición y candidata a las elecciones generales, Yolanda Díaz, «ha decidido mantener». Se ha pronunciado así en una intervención este sábado en el Consejo Ciudadano Estatal de Podemos, sus primeras declaraciones públicas desde que se conoció su exclusión de las listas.
La formación morada asume ya definitivamente que Montero no entrará en ninguna lista, lo que era su pretensión, ya que todavía quedan dos días antes de que finalice el plazo para presentar las listas del 23J. «Hemos intentado que los dirigentes de Sumar rectificaran esta decisión. Lamentablemente, no ha sido posible», ha asegurado la secretaria general del partido, Ione Belarra, quien ha intervenido antes de la ministra de Igualdad.
Belarra admite que dentro de Sumar tendrán «un papel modesto». «No vamos a marcar la estrategia de esta campaña, nuestro trabajo va a ser ponernos por detrás de Yolanda Díaz y estar allí donde se nos pida». Ha afirmado que el veto a Montero es «sobre todo un error porque implica la victoria del disciplinamiento de las derechas», que manda un mensaje político «peligroso» para la izquierda y la lucha de las mujeres.
Belarra: Podemos «nunca le soltará la mano» a Montero
Aunque su partido prescinde finalmente de la presencia de su número dos en las listas, Belarra ha asegurado que Podemos «nunca le soltará la mano». Ha reivindicado su «inmenso orgullo» por el trabajo de Montero al frente de Igualdad, de la que ha señalado que no solo es parte del pasado de la formación, sino que es «parte indispensable del futuro» de la misma
«Si hemos firmado la candidatura conjunta con Sumar es porque la única posibilidad de revalidar el gobierno de coalición pasa por presentar una candidatura única», ha insistido la líder de Podemos, quien ha reconocido el momento difícil por el que pasa su partido. La formación morada sufrió un fuerte desplome el 28M, perdiendo prácticamente todos los gobiernos de coalición autonómicos de los que formaba parte y desapareciendo de instituciones como la Comunidad de Madrid, el ayuntamiento de la capital y el parlamento autonómico valenciano.
Con la convocatoria electoral adelantada, además, se vieron obligados a pactar con la vicepresidenta segunda en solo diez días para formar una coalición con Sumar, que integra a otros 14 partidos. En el reparto de puestos en las listas, punto principal de fricción entre Podemos y Sumar durante la negociación, finalmente los morados tienen un papel muy secundario, con el número cinco en Madrid para Belarra, el cuatro en Barcelona y cabezas de lista en Murcia, Navarra, Guipúzcoa o Las Palmas. RTVE