El primer ministro indio, Narendra Modi, anunció este lunes que desde el próximo 21 de junio el país actualizará su política de vacunas contra el coronavirus, proporcionando ahora dosis gratis a todos los grupos de edad, después de recibir críticas de la oposición y del Tribunal Supremo.
«A partir del lunes 21 de junio, en todos los estados del país, para todos los ciudadanos mayores de 18 años, el Gobierno de la India proporcionará vacunas gratuitas», dijo Modi en un mensaje televisado al país.
«El propio Gobierno de la India comprará el 75 % de la producción total de vacunas a los fabricantes y se lo entregará a los gobiernos estatales sin costo alguno», añadió.
Con este anuncio el mandatario pone fin a la política puesta en marcha el pasado 1 de mayo que dejó bajo la responsabilidad de los gobiernos regionales la adquisición y la vacunación de la población de entre 18 y 44 años, con los presupuestos de los estados.
Esto mientras que el Gobierno nacional asumía el costo solo de las vacunas destinadas a su población de más de 45 años, trabajadores sanitarios y de la primera línea de lucha contra la pandemia.
La política ampliamente criticada por los gobiernos regionales de la oposición y partidos políticos, fue también cuestionada por el Tribunal Supremo que, entre otros reclamos, consideró incongruente la exclusión de menores de 44 años de la protección del Gobierno.
La protesta a esta política estaba también alimentada por el hecho de que los fabricantes de vacunas en el país han fijado precios más altos para las vacunas adquiridas por los estados que las compradas por el Gobierno nacional, comprometiendo aún más los presupuestos locales.
Modi declaró hoy que la descentralización de vacunas decidida por el Ejecutivo fue una respuesta a los gobiernos regionales que criticaron las directrices de la campaña de vacunación de Nueva Delhi, lanzada solo para inmunizar a grupos prioritarios.
Así, con la decisión anunciada hoy, el Gobierno de Modi asume el control y el costo del 75 % de las vacunas destinadas a la población india, dejando solo un 25 % en manos de hospitales privados.
La India, con más de 1.350 millones de habitantes, es uno de los mayores fabricantes de vacunas del mundo, y depende en gran parte de las dosis fabricadas en el país.
Sin embargo, pese a la producción activa de unas siete fábricas nacionales y las excepciones arancelarias para importar vacunas contra la covid, la nación no ha podido satisfacer la demanda doméstica, y su ambiciosa campaña lanzada en enero se ha enfrentado a serios problemas de escasez.
Hasta ahora, el país asiático ha administrado unos 230 millones de dosis. EFE