El Gobierno de España llamó este martes a evitar “un derramamiento de sangre” en Venezuela después de que Juan Guaidó anunciara el apoyo de algunos militares, maniobra denunciada por el oficialismo como un “intento de golpe de Estado”.
“Deseamos con todas nuestras fuerzas que no se produzca un derramamiento de sangre”, dijo Isabel Celáa, portavoz del Ejecutivo de Pedro Sánchez, que a principios de febrero reconoció a Guaidó como presidente encargado del país, según refiere AFP.
Repitiendo la petición lanzada entonces, la portavoz gubernamental insistió en la necesidad de una “convocatoria inmediata de elecciones” presidenciales y el lanzamiento de un “proceso democrático pacífico”.
“La solución para Venezuela tiene que venir de la mano de un movimiento pacífico, de elecciones democráticas. Por tanto, España no respalda ningún golpe militar“, añadió.
Celáa también aseguró que Pedro Sánchez estaba siguiendo “muy de cerca” el desarrollo de esta nueva crisis en el país petrolero y que “se han activado todos los cauces consulares de protección” para los más de 167.000 españoles residentes en Venezuela.