Las autoridades cubanas rompieron este viernes el diálogo con artistas que la semana pasada protagonizaron una protesta frente a la sede del Ministerio de Cultura, luego de que los jóvenes les hicieran llegar una serie de condiciones.
Al mismo tiempo acusaron a algunos de ellos de estar financiados y orientados por Estados Unidos.
“El Ministro de Cultura no se reunirá con personas que tienen contacto directo y reciben financiamiento, apoyo logístico y respaldo propagandístico del gobierno de los Estados Unidos y sus funcionarios”, dijo el ministerio en una una nota oficial.
“Tampoco lo hará con medios de prensa financiados por agencias federales estadounidenses”, agregó el comunicado.
La víspera, una treintena de artistas que habían sido recibidos por el viceministro de Cultura, Fernando Rojas, emitieron un documento con sus condiciones para continuar el diálogo en una segunda reunión.
El texto de los artistas, que también fue publicado por el Ministerio de Cultura, incluye siete demandas como garantías de seguridad para los que se reúnen con el gobierno y una lista “no negociable” de personas en dicho encuentro, además de la presencia del presidente Miguel Díaz-Canel y representantes de las carteras de Interior y Justicia.
A su vez pide que se invite a medios no oficiales o alternativos como Cibercuba, con sede en España pero que las autoridades sostienen que está financiado por Estados Unidos.
La semana pasada un grupo de artistas se concentró de manera espontánea frente al Ministerio de Cultura y permaneció allí hasta el sábado, cuando fue recibido por Rojas y acordaron nuevos encuentros.
Los creadores demandaban más espacio para el arte independiente, no ser hostilizados por no trabajar para las instituciones oficiales y la liberación de un rapero que había sido condenado luego de insultar a un policía.
La liberación del músico Denis Solís había motivado desde mediados de noviembre una protesta de una docena de sus compañeros del proyecto Movimiento San Isidro -una iniciativa de artistas muy críticos al gobierno- que se atrincheraron en una casa. El desalojo del grupo fue el puntapié inicial de la concentración frente al Ministerio y el posterior diálogo con Rojas.
Precisamente el líder del Movimiento San Isidro es Luis Manuel Otero Alcántara, una de las personas que está en la lista entregada por los artistas y que el Ministerio de Cultura rechaza como interlocutor.
Imágenes de medios oficiales cubanos de los últimos días mostraron a Otero Alcántara -quien fue encarcelado por usar de manera irreverente la bandera en el baño- en encuentros con funcionarios de Estados Unidos y otras personalidades que suelen ser sistemáticamente críticas del modelo cubano. AP