Nuevo episodio del criptodrama. Las autoridades de Bahamas informaron el arresto de Sam Bankman-Fried, fundador de la quebrada plataforma de compraventa de criptomonedas, FTX, tras una «notificación» de Estados Unidos sobre la presentación de cargos contra él y de cara a una posible extradición.
El fiscal general de Bahamas, Ryan Pinder, señaló en un comunicado que «como resultado de la notificación recibida y el material entregado con ella, se ha considerado apropiado que el fiscal general pida el arresto de Sam Bankman-Fried y que permanezca bajo custodia, en línea con la Ley de Extradición».
«En el momento en el que se haga una petición formal de extradición, Bahamas planea tramitarla rápidamente«, resaltó Pinder citado en Cinco Días.
El primer ministro de Bahamas, Philip Davis, apuntó que «Bahamas y Estados Unidos tienen un interés común en hacer rendir cuentas a todas las personas vinculadas con FTX que puedan haber traicionado la confianza pública y violado la ley».
Esto significa que el acusado también deberá enfrentar investigaciones penales en Bahamas, dado que el país servía como sede de la compañía.
El complejo residencial donde fue detenido Bankman-Fried en Nassau ya había dado lugar a la polémica. El ejecutivo, sus padres y otros altos ejecutivos de la quebrada firma compraron al menos 19 propiedades por valor de casi 121 millones de dólares en las Bahamas en los últimos dos años, según muestran los registros oficiales de propiedades.