El proyecto de nueva Constitución, que el Parlamento de Cuba comenzó a discutir este sábado, busca allanar legalmente el camino para el matrimonio entre personas del mismo sexo, una importante demanda de la comunidad LGBT en la isla socialista.
En su artículo 68, el proyecto define el matrimonio como “la unión voluntaria consensuada entre dos personas, sin especificar sexo”, señaló el diario oficial Granma, en una reseña de los debates que antecedieron a la sesión ordinaria de la Asamblea Nacional.
De este modo, modificaría a la actual Carta Magna, que data de 1976 y limita el matrimonio a “la unión voluntaria concertada de un hombre y una mujer con aptitud legal para ello“.
“Sería la puerta abierta para poder avanzar con posterioridad en la legalización de las parejas homosexuales”, dijo en su blog el periodista y reconocido activista gay Francisco Rodríguez (Paquito), también miembro del gobernante y único Partido Comunista de Cuba (PCC).
Además, subrayó, el proyecto “incorpora el principio de no discriminación por orientación sexual e identidad de género”, lo que permitiría adoptar “otras normas jurídicas y políticas públicas” para proteger los derechos de la comunidad LGBT cubana.
Sin embargo, “Paquito” destacó que la modificación del concepto de matrimonio en la nueva Constitución “es solo el primer paso”, y que en esa materia “la pelea no será fácil”.
“Hay posturas ideológicas y políticas opuestas a estos cambios, cuyos representantes harán todo lo posible porque estos sueños, hoy posibles y ya tan cercanos, naufraguen”, consideró.
Desde hace más de una década, la diputada Mariela Castro, hija del expresidente Raúl Castro, encabeza la defensa de las minorías en Cuba, donde la Revolución que triunfó en 1959 persiguió en sus primeros años a los homosexuales. Incluso los envió a campos de trabajo forzado para “reeducarlos”.
Como líder del Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex), Mariela Castro promueve políticas en favor de lesbianas, gays, bisexuales y transgéneros (LGBT). Entre los temas que agita figura el matrimonio homosexual.
“Darles derechos a los que no los tienen no implica quitárselo a los que ya los tienen“, aclaró Mariela en los debates parlamentarios, según imágenes difundidas el viernes por la televisión local.
En esas discusiones, otro diputado elogió la modificación del matrimonio “como un gran salto de Javier Sotomayor (recordista mundial cubano en salto de altura, ndlr)”, pero expresó su preocupación por la posibilidad de que una pareja homosexual adopte niños, un punto que no forma parte de este debate constitucional.
El proyecto de 224 artículos, elaborado por una comisión parlamentaria que dirigieron Raúl Castro y el presidente Miguel Díaz-Canel, será votado por la Asamblea Nacional entre este sábado y el lunes y luego sometido a un referendo popular antes de su aprobación final.