Las autoridades de salud pública del condado de San Diego, en California (EEUU), comenzaron la búsqueda de personas, sobre todo aquellas que pudieron estar en contacto con un murciélago infectado con rabia.
De acuerdo con los reportes recientes de medios estadounidenses, el pequeño animal fue hallado en un estacionamiento de Oceanside, alrededor de las 9:00 de la mañana del pasado miércoles, 23 de octubre.
Desde momento, emitieron una advertencia a la población y llamaron a reportar el caso de cualquier persona que estuviera en el área y pudiera haber tenido contacto directo con el murciélago.
Asimismo, solicitaron a los lugareños comunicarse con los Servicios de Salud Pública del Condado.
Vale recordar, que los murciélagos son la principal fuente de infección en los casos de rabia en Estados Unidos y Canadá.
La rabia es una de las enfermedades más antiguas de la humanidad, su conocimiento se remonta aproximadamente a unos 4.000 mil años A.C.
En sus inicios, la rabia se limitaba a especies silvestres como zorros, lobos, mapaches y tejones. Sin embargo, a medida que estos animales se desplazaban y transmitían el virus, la enfermedad se propagó a nivel mundial.
Con el tiempo, la rabia llegó a las especies domésticas, estableciendo un contacto más cercano con los humanos y aumentando así el riesgo de transmisión.
La principal forma en que la rabia se transmite de animales a humanos es a través de mordidas. Las mordeduras de murciélagos, por ser tan pequeñas, pueden pasar desapercibidas. En casos excepcionales, el virus puede ingresar al cuerpo a través de mucosas o heridas abiertas al entrar en contacto con un animal infectado.
¿LA RABIA ES MORTAL EN HUMANOS?
En efecto, la rabia es una amenaza grave para la salud humana y, como se mencionó, los murciélagos son uno de los principales portadores de este virus.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), una vez que el virus alcanza el sistema nervioso central y aparecen los síntomas clínicos, el desenlace es siempre mortal.
De hecho, la rabia del murciélago se ha convertido recientemente en una amenaza para la salud pública en Australia, América Latina y Europa Occidental. Sin embargo, en estas regiones el número de muertes por rabia transmitida por murciélagos es inferior a las causadas por mordeduras de perros infectados.