Este martes el embajador de la República Bolivariana de Venezuela ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) con sede de Ginebra, Jorge Valero, denunció la imposición sistemática de medidas coercitivas unilaterales a Estados soberanos aun cuando desde el organismo multilateral se ha demandado su levantamiento para atender la crisis sanitaria derivada del covid-19.
A su juicio estas medidas coercitivas unilaterales son, en la práctica, armas de destrucción masiva. Una modalidad de guerra donde los tanques, los aviones y las bombas son sustituidos por cruentos bloqueos económicos y financieros
El representante permanente de Venezuela ante la ONU-Ginebra evocó los llamamientos de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, y de la relatora Alena Douhan para el cese de las sanciones unilaterales, según nota de prensa del ministerio del Poder Popular para Relaciones Exteriores.
“Venezuela se unió al llamado de la Relatora para que los gobiernos que utilizan las medidas coercitivas unilaterales como herramientas de relaciones exteriores las retiren de inmediato, porque impiden la compra de medicamentos, equipos médicos, alimentos, y otros bienes esenciales”, afirmó.
El secretario General de la ONU, António Guterres, también ha solicitado el levantamiento de las sanciones ilegales que infringen la Carta de las Naciones Unidas.
Valero advirtió que con las medidas coercitivas unilaterales se pretende obligar a otros Estados a renunciar a sus derechos soberanos […] «Se pretende imponer modelos políticos con estrategias de cambio de régimen», reseñó la misiva.