Eliminan subsidios en el gobierno de Donald Trump afectando los seguros de salud

A finales del mes pasado, Elizabeth Wick, terapeuta especializada en sobrevivientes de agresión sexual, recibió un correo que cambiaba drásticamente su panorama económico: su aseguradora, Blue Cross and Blue Shield of Texas, le informó que la prima mensual de su póliza de Obamacare subiría de US$ 862 a US$ 1.380 el próximo año.

Actualmente, Wick recibe $400 en subsidios federales que alivian el costo del seguro, pero esos beneficios podrían desaparecer en 2026 si expiran los subsidios ampliados, como se prevé. Sin esta asistencia, pagar la cobertura resultaría prácticamente imposible y podría obligarla a cerrar su práctica privada y buscar un empleo que ofrezca seguro médico.

La situación de Wick refleja la realidad de millones de estadounidenses que dependen de la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio (ACA). La finalización de los subsidios adicionales y el aumento de las primas están llevando a muchos a considerar recortar otros gastos esenciales, evitar atención médica o renunciar por completo a su seguro.

El debate sobre la extensión de los subsidios ampliados ha generado un estancamiento en el Capitolio y un cierre récord del Gobierno federal. Los demócratas condicionan su apoyo al financiamiento del año fiscal 2026 a la continuidad de la ayuda adicional, mientras que los republicanos insisten en negociar únicamente tras la reapertura del Gobierno.

Los subsidios ampliados, implementados por un Congreso demócrata durante la pandemia, permitieron que un récord de 24 millones de personas se inscribiera en pólizas de Obamacare, incluyendo muchos consumidores de clase media. Sin embargo, los subsidios originales de la ley solo aplican a quienes ganan menos de cuatro veces el nivel federal de pobreza, aproximadamente US$ 63.000 para una persona y US$ 129.000 para una familia de cuatro.

El aumento de los costos de atención médica y la expiración de la ayuda adicional han llevado a las aseguradoras a subir sus tarifas un 26 % en promedio para el próximo año. Para los afiliados que pierdan los subsidios, el impacto será mucho mayor, con pagos de primas que podrían más que duplicarse según el grupo de investigación KFF.