El rey Felipe VI ha designado al presidente en funciones y líder del PSOE, Pedro Sánchez, como candidato a la Presidencia del Gobierno, tras cerrar la segunda ronda de consultas celebrada tras la investidura fallida de Alberto Núñez Feijóo. Así lo ha anunciado la presidenta del Congreso, Francina Armengol, que no ha dado fecha del pleno de investidura.
El monarca ha cerrado este martes la ronda con los principales líderes- Sánchez y Feijóo- a los que ha recibido en el Palacio de la Zarzuela.
Tras esos encuentros, Armengol ha acudido a la llamada del rey, que le ha comunicado que Sánchez es el nuevo candidato.
Ha señalado que solo convocará un nuevo pleno de investidura con la nueva candidatura cuando las negociaciones políticas «estén maduras».
«Los tiempos estaban muy marcados y tasados, se tiene hasta el 27 de noviembre y entiendo que ahora hay que hacer las negociaciones oportunas para poder hacer una investidura con apoyos suficientes y que salga adelante», ha dejado claro.
Sánchez debe armar una mayoría junto a nacionalistas e independentistas
El secretario general del PSOE ha trasladado al rey su intención de reeditar un gobierno de coalición con Sumar (ambos suman 152), pero además necesita del apoyo de los partidos nacionalistas e independentistas para formar un bloque de 178 diputados (PSOE, Sumar, ERC, Junts, EH Bildu, PNV y BNG).
Sánchez tratará de conseguir además el apoyo del único escaño de Coalición Canaria, formación que apoyó la investidura de Feijóo y que se abre ahora a apoyar ahora al PSOE. En el caso de conseguir ese apoyo, la abstención de Junts le valdría a Sánchez.
Parece improbable, eso sí, que ERC y Junts voten diferente en la investidura del socialista, para la que ya han puesto condiciones: aprobar una ley de amnistía a los condenados por el ‘procés’ y avanzar en el reconocimiento del derecho de autodeterminación para celebrar un nuevo referéndum.
ERC, Junts, EH Bildu y BNG han vuelto a rechazar verse con el monarca, tal y como hicieron el 21 y 22 de agosto, en la primera ronda que convocó tras las elecciones generales del 23 de julio y en la que fue designado Feijóo.
Con esta designación sigue el guion planteado por el PSOE que incluía en su calendario esperar a que Feijóo fracasara en su investidura para posteriormente arrancar las negociaciones oficiales con esos partidos. Llevan semanas negociando, tal y como las partes han reconocido, aunque ahora sí ya tienen fechas marcadas para avanzar o no en la negociación.
Sánchez tiene hasta el 27 de noviembre para tratar de sumar esa mayoría que le haga presidente ya que si no lo consigue se pasaría al escenario que ahora no contempla el PSOE y que lleva a elecciones generales repetidas el 14 de enero. RTVE