Washington aprobó el martes la venta a Japón de misiles antibalísticos por 3.300 millones de dólares, luego de una serie de nuevas pruebas armamentísticas por parte de Corea del Norte que podrían amenazar al aliado estadounidense.
Japón comprará hasta 73 de los misiles SM-3 Block IIA fabricados por la compañia Raytheon, diseñados para ser disparados por el sistema Aegis montado a bordo de un barco con el objetivo de interceptar misiles balísticos entrantes, sostuvo el Pentágono.
La venta se concreta en momentos en que Corea del Norte está expandiendo sus capacidades ofensivas con misiles, demostrando en los últimos dos años la capacidad de lanzar misiles balísticos de mediano y largo alcance, con posibilidad de incluir una ojiva nuclear en la punta, lo que sería una amenaza tanto para Japón como para Estados Unidos.
Este mes, Pyongyang ha llevado a cabo siete pruebas de nuevos misiles balísticos de corto alcance, al menos uno de los cuales voló lo suficientemente lejos como para llegar a Japón.
El Pentágono también aprobó nuevas ventas de armas a Hungría, Corea del Sur, Lituania y Dinamarca, por un valor total de otros 943 millones de dólares.
Por ejemplo, Hungría comprará 180 misiles avanzados aire-aire de alcance medio AIM-120C-7, también fabricados por Raytheon, el gran contratista de defensa, en tanto Dinamarca comprará sistemas de sonar y sonoboyas de baja frecuencia de Lockheed Martin.