El Papa Francisco, quien ha hecho en los últimos años enérgicos llamados a combatir el calentamiento global, pidió el sábado a las personas que trabajen juntas para evitar que los océanos se llenen de desechos plásticos.
“No podemos permitir que nuestros mares y océanos estén plagados de interminables campos flotante de plásticos”, dijo el Papa. “Necesitamos orar como si todo dependiera de la providencia de Dios y trabajar como si todo dependiera de nosotros”, agregó.
Los comentarios del Pontífice son parte de un mensaje en el marco del cuarto día de oración anual “para la protección de la creación”, el cual se celebra con otras denominaciones cristianas.
El Papa, que se dirigió a cerca de 100 líderes empresariales invitados al Vaticano para la ocasión, dijo que “cada uno de nosotros tiene que ser responsable de los demás y del futuro de nuestro planeta”.
Cifras de Naciones Unidas muestran que ocho millones de toneladas de botellas de plástico, envases y otros desechos entran a los océanos cada año, matando la vida marina e ingresando en la cadena alimentaria humana.
Los científicos han instado a aplicar restricciones más estrictas sobre los desechos plásticos. En diciembre, casi 200 naciones acordaron limitar la contaminación plástica en los océanos, advirtiendo que ésta podría superar a los peces al 2030.
Francisco escribió un importante documento llamado “Laudato Si” (Alabado seas) sobre la protección del medio ambiente en 2015.
El Papa se ha alineado con aquellos que creen que el calentamiento global es, al menos en parte, producido por el hombre y ha elogiado a los científicos que están trabajando para mantener bajo control la temperatura del planeta.