El líder de Corea del Norte Kim Jong-un ordenó la ejecución de un primer viceministro de su Gobierno por presuntamente haberle “faltado el respeto” y envió a otros dos integrantes de su gabinete a “campos de reeducación”.
Según dijo el vocero del ministerio de Unificación de Corea del Sur Jeong Joon-Hee, “el ministro de Educación Kim Yong-Jin fue ejecutado” el mes pasado. Sin embargo, la información no fue confirmada por los medios norcoreanos.
Fuentes oficiales surcoreanas comentaron a la agencia Yonhap que el funcionario de 63 años fue acusado por ser “antirrevolucionario”.
Detallaron que “fue denunciado por dormirse cuando estaba debajo de la tribuna durante una sesión del parlamento”. Luego fue sometido a un interrogatorio en el que se “revelaron sus otros crímenes”.
100 funcionarios de alto rango han sido sometidos a cartigos políticos desde que llegó Kim Jong-un al poder hace cinco años, aseguran los servicios secretos surcoreanos.
El caso más sonado fue la ejecución de Jang Song-Thaek, tío del líder norcoreano, en el 2013, por alta traición y corrupción.