El general del Ejército que está a cargo de la seguridad de Santiago tras un decreto de estado de emergencia ordenó toque de queda total en la capital chilena a partir de las 01H00 GMT del domingo, para hacer frente a una extendida ola de protestas.«Habiendo analizado la situación y los desmanes que han ocurrido el día de hoy, he tomado la decisión de decretar la suspensión de libertades y de movimiento a través de un toque de queda total», dijo el general Javier Iturrita.
El jefe del Ejército Javier Iturriaga anunció el sábado la implementación del toque de queda total en todo Santiago, que regirá desde las 22 horas hasta las 7 de la mañana, ante la persistencia de las protestas masivas motivadas por un alza de las tarifas del Metro.
“Teniendo muy en cuenta la obligación legal que tenemos de proteger a las personas y sus bienes he tomado la decisión de decretar la suspensión de libertades personales de movimiento a través de un toque de queda total en las provincias de Santiago, Chacabuco y las comunas de Puente Alto y San Bernardo”, sostuvo Iturriaga pasadas las 19:30, hora local.
Y agregó: “La restricción de libertades establece que las personas deben estar en sus hogares y lo que lo necesiten deben pedir salvoconducto. Este documento los faculta para desplazarse y es el que será solicitado por la fuera pública. El control lo hace Carabineros y la PDI”.
La vigencia de la medida será “evaluada de forma periódica y oportunamente notificada a la opinión pública”, según información oficial.
“La decisión de Piñera de movilizar a los militares en Chile, en un país que vivió 17 años una dictadura represiva, es muy preocupante y podría aún más desestabilizar la situación (en el país)”, indicó a AP la académica Jennifer Pribble, del Departamento de Ciencias Políticas de la Universidad de Richmond, en Estados Unidos.
El general inspector de Carabineros, Mauricio Rodríguez, ofreció el sábado un nuevo balance de los disturbios, contabilizando 308 personas detenidas, 156 carabineros lesionados, 5 de ellos con lesiones graves, 49 vehículos policiales dañados, 11 denuncias de civiles lesionados y 41 estaciones de metro vandalizadas.