Estados Unidos envió el martes de regreso a México al primer migrante centroamericano solicitante de asilo que aguardará en territorio mexicano mientras su caso es procesado, dijeron autoridades.
Reuters
Se trata de Carlos Gómez, un hondureño de 55 años que llegó al país en la primera caravana y regresó a México desde Estados Unidos por el cruce fronterizo de El Chaparral, en la ciudad de Tijuana.
“El año pasado solicitó una tarjeta de visitante por razones humanitarias, la cual le fue otorgada con fecha de vencimiento al 25 de noviembre de 2019”, dijo la Secretaría de Gobernación en un breve comunicado.
Con tan solo una mochila y acompañado de agentes migratorios de México, Gómez sería llevado a un refugio temporal para migrantes en Tijuana tras haber ingresado al país bajo una política estadounidense denominada protocolos de protección al migrante.
Según la política, Estados Unidos devolverá a México a inmigrantes no mexicanos mientras sus solicitudes de asilo se procesan en los tribunales de inmigración estadounidenses.
El funcionario del INM dijo que no esperaba la llegada de más solicitantes de asilo el martes, luego de que una portavoz del Departamento de Seguridad Nacional confirmó más temprano que Estados Unidos comenzaría a enviar a los migrantes este día.
Inicialmente estaba previsto que Estados Unidos devolviera a un grupo de hasta 20 personas por día a través de Tijuana y que gradualmente lo hiciera por otros puntos fronterizos entre ambos países, dijo el viernes la cancillería mexicana.
A los solicitantes de asilo se les ha otorgado tradicionalmente el derecho a permanecer en Estados Unidos mientras sus solicitudes sean revisadas por un juez de inmigración estadounidense, pero una acumulación de muchos casos atrasados podría significar que el proceso lleve años.
El gobierno mexicano dijo en diciembre que autorizaría por razones humanitarias y de manera temporal el ingreso de algunos extranjeros provenientes de Estados Unidos, luego de que su vecino del norte le informó de sus planes de devolverlos a México mientras tramitan sus pedidos de asilo.
El objetivo del plan es reducir el número de familias que llegan en su mayoría desde Centroamérica y dicen que temen regresar a sus países de origen debido a las amenazas de violencia. El gobierno del presidente de Estados Unidos Donald Trump dice que muchas de las reclamaciones no son válidas.