Sesenta personas han fallecido hasta ahora por coronavirus y 1.962 están contagiadas en Ecuador, donde se ha extendido hasta el 5 de abril la suspensión de la jornada laboral, informaron este lunes las autoridades.
De acuerdo al Gobierno, con la única excepción de la provincia amazónica del Napo, las restantes 23 del país registran algún caso de contagio.
Más del 70 % de ellos se concentran en la provincia del Guayas (1.396), seguida por Pichincha (188), Los Ríos (60), Azuay (57), Manabí (50) y El Oro (30), mientras que el resto tienen menos de 30 casos.
La mayor parte de defunciones han ocurrido en Guayas (38), seguida por Los Ríos y Pichincha, con cinco cada una, entre otras.
Al momento hay 3.083 casos sospechosos de COVID-19 en Ecuador, donde se han descartado 2.223 casos.
Ante esta situación, en una rueda de prensa virtual la ministra de Gobierno, María Paula Romo, apuntó que el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) ha decidido «llevar hasta el 5 de abril la suspensión de jornada laboral», que inicialmente estaba fijada hasta mañana, 31 de marzo.
Esa suspensión seguirá «manteniendo las actividades básicas funcionando», comentó Romo al recordar que el próximo domingo se cumplirán «tres semanas de las medidas más restrictivas», que incluyen un toque de queda de quince horas en todo el país, mientras que en Quito hay, incluso, restricción del uso del espacio público.
La funcionaria avanzó que a lo largo de la semana se valorará si se prolonga nuevamente la medida y si se hace alguna diferenciación por provincia, región o ciudad.
Ante varias denuncias, especialmente en la provincia del Guayas, sobre problemas con el levantamiento de cadáveres, las autoridades pidieron tranquilidad a la ciudadanía pues hay un protocolo establecido.
Romo adelantó que elaborarán un boletín semanal sobre las defunciones, especificando las provincias y las causas «más allá de que tengan o no un examen positivo de COVID-19».
Y recordó que, en circunstancias normales, hay en Ecuador 6.000 defunciones cada mes y alrededor de 71.000 al año.
«A inicios de este año, enero de 2020, en Guayaquil tuvimos 828 defunciones. De esas el 46 % falleció en sus casas», dijo al indicar que muchos casos se han acumulado pues las funerarias prefieren que sean las Fuerzas Armadas las que hagan el levantamiento de los cuerpos por temor a posibles contagios.
Por otra parte, Romo indicó que las instituciones privadas también se sumarán a la lucha contra el coronavirus aunque, en una primera fase, la estrategia del Gobierno consistiera en derivar todos los casos al sistema público de salud.
Precisamente este lunes, la Defensoría del Pueblo propuso aplicar una declaratoria de uso y servicio público para clínicas, hospitales privados y hoteles debido al alcance de la emergencia sanitaria.
EFE