Un joven de 17 años y un anciano de 93 fallecieron en España por un «golpe de calor», debido a las altas temperaturas que azotan el país y parte de Europa, anunciaron las autoridades este viernes.
El muchacho de 17 se encontraba el jueves segando en el pueblo andaluz de Castro del Río, cuando de pronto «sintió mareos» y se metió en la piscina de la finca donde trabajaba, indicó en un comunicado el gobierno regional.
Al salir «comenzó a convulsionar», y tuvo que ser ingresado el jueves al mediodía en la unidad de cuidados intensivos del hospital Reina Sofía, en la cercana ciudad de Córdoba.
Allí falleció la madrugada del viernes «después de ser sometido a una operación de Recuperación Cardíaca», precisó el gobierno de Andalucía.
También el jueves, un anciano de 93 años se desplomó cuando caminaba por el centro de Valladolid, en el norte del país. Según indicó a AFP la policía local este viernes, falleció de «muerte natural por golpe de calor».
España vive una ola de calor con temperaturas superiores a los 40 grados, que continuará en la mayor parte del país hasta el sábado, incluyendo zonas del norte -por lo general más frescas- como Navarra, La Rioja, País Vasco y Aragón. Sólo el noroeste (Galicia y Asturias) se mantenía a salvo.
Este viernes se encontraban en alerta por altas temperaturas 34 de las 50 provincias del país.
También se encontraba en alerta la región de Cataluña, donde los bomberos luchan contra un gran incendio que según las autoridades regionales afecta 6.500 hectáreas.
En un comunicado, los bomberos del gobierno regional catalán indicaron que durante toda la noche estuvieron trabajando 400 efectivos, incluyendo militares, y que por la mañana se incorporaron medios aéreos.
El jefe del cuerpo de bomberos catalanes, David Borrell, advirtió que el trabajo será duro porque «la previsión meteorológica no es buena para hoy», con hasta «44 grados en la zona y humedades relativas muy bajas».