La mujer detenida por el incendio que dejó 10 muertos en un edificio del distrito 16º de París habría provocado el siniestro tras una enésima disputa con un vecino, señaló este martes una fuente judicial.
Según el fiscal Rémy Heitz, la mujer, de algo más de 40 años, presenta “antecedentes psiquiátricos”.
“Esta mujer fue interceptada en la calle inmediatamente después del incendio. Se encuentra bajo custodia”, dijo el funcionario, quien añadió que hay una investigación abierta por “incendio voluntario con (resultado de) muertos y heridos”.
La mujer, de algo más de 40 años, presenta “antecedentes psiquiátricos” y habría provocado el siniestro tras una enésima disputa con un vecino.
Esta persona fue detenida por la policía de París.
En tanto, una fuente policial señaló que la mujer había sido “arrestada en estado de ebriedad cuando trataba de incendiar un vehículo”.
De acuerdo con informaciones reunidas por la policía, esta mujer tenia un conflicto permanente con un vecino, y ella había iniciado un nuevo altercado en la noche al punto de que otras personas llamaron a la policía para que interviniera.
Una joven pareja que vive en el tercer piso del inmueble siniestrado dijo a la AFP que hubo una “discusión” en la noche, y el incendio se inició unas tres horas más tarde.
El incendio fue de una violencia increíble que necesitó de seis horas de trabajo por parte de los bomberos.
“Al inicio, un hombre gritó: ‘¡Hay gente que debe levantarse temprano para trabajar!’. Decía que había música, aunque nosotros no la escuchamos”, dijo uno de los integrantes de la pareja, que se identificó como Clément.
Poco más tarde, añadió, era posible escuchar fuertes gritos de una mujer en el edificio. “Ella gritaba mucho, no parecía tener buenas intenciones”, expresó.
La novia de Clément, Nathalie, dijo que “aparentemente, ella metió hojas de papel por debajo de la puerta de su vecino y les prendió fuego. Pero eso no lo vimos”.
Por lo menos 10 personas murieron en el incendio, de una “violencia increíble”, según los bomberos, que necesitaron seis horas de intenso trabajo para controlar las llamas, reseña Sumarium