Migración Colombia y el Instituto Departamental de Salud de Norte de Santander evalúan la implementación de un sistema biométrico con identificación dactilar.
Esta acción permitirá controlar el ingreso de ciudadanos extranjeros a estas instituciones asistenciales colombianas. A su vez, determinará las variables en la prestación del servicio médico hacia la comunidad extranjera.
La percepción de inseguridad en la entidad se agrava de la misma manera como aumenta la demanda de usuarios extranjeros. En lo que va de 2019, un total de 46.922 atenciones acumula esta población, lo cual supera el consolidado de 363.374 citas otorgadas durante todo 2019.
«Esta es una medida que hemos venido impulsando y muy posiblemente empezaremos a emplear a final de este año o del próximo. Este sistema tiene dos propósitos: acceder a la oferta estatal de servicios y conseguir la plena identidad de las personas en temas judiciales», explicó Christian Krüger, director de Migración Colombia.
Precisó que es un ejercicio que ayudará a ordenar la migración y dar seguridad a las personas que están llegando, a las comunidades receptoras y a Colombia.
El director del IDS, Juan Alberto Vitar, añadió que por medio de este esquema tecnológico también se pueden establecer patologías, frecuencia de atención y cantidad de pacientes por cada especialidad. Variables clave para determinar cuál es la demanda de estos usuarios.
«La propuesta está encaminada en dos aspectos. Primero, en ampliar la cobertura de atención en el régimen contributivo y subsidiado de la población inmigrante, identificando la verdadera demanda de esta población. Y segundo, estamos solicitando la instalación de este sistema de control biométrico para verificar dónde están acudiendo y quién los está atendiendo”, indicó Juan Alberto Vitar, director del IDS.
Ilegalidad
Para Juan Agustín Ramírez, gerente del Hospital Universitario Erasmo Meoz de Cúcuta, el personal médico de la entidad podría acceder con esta herramienta tecnológica a datos de los usuarios como el verdadero nombre o los antecedentes judiciales de cada ciudadano, debido a que el centro de salud se ha convertido en el más frecuentado por la población venezolana.
“Es que en la frontera hay un grave problema de ilegalidad. La cifras dicen que por cada persona que ingresa legalmente, entran dos de manera irregular. Entonces, nosotros no somos Migración, pero con ese huellero biométrico sí podríamos identificar a la persona y ese registro cotejarlo con las autoridades”, aseguró el directivo.
Ramírez precisó que la plataforma también podría acceder a información de la Registraduría. De esta forma, se determinaría si los migrantes atendidos gozan de doble nacionalidad o si son colombianos retornados.
En lo que va del año, la red hospitalaria del departamento ha registrado 42.000 atenciones. El número sobrepasa las 38.000 citas reportadas en 2018. Las autoridades en salud calculan que esta cifra termine para diciembre en casi 80.000, solo en este aparato asistencial.