El Gobierno de Estados Unidos (EEUU), presidido actualmente por Joe Biden, estaría llevando a cabo una revisión de su política de sanciones hacia Venezuela con la finalidad de garantizar que estén en línea con sus objetivos. Así lo dijo a Bloomberg un funcionario de la administración estadounidense.
De acuerdo con la fuente, Biden estaría esperando ver pasos concretos del presidente Nicolás Maduro. Incluso destacó que el gobierno nacional ya “debería estar hablando con su oposición para establecer elecciones libres y justas”.
Respecto a los supuestos contactos de personalidades que estarían actuando como intermediarios entre ambas administraciones, el funcionario agregó que “los están observando muy de cerca”.
En ese sentido, Blomberg mencionó que entre las figuras que estarían intercediendo se encuentran el presidente del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes, Gregory Meeks; el exgobernador de Nuevo México, Bill Richardson; y el director del Programa Mundial de Alimentos, David Beasley.
El citado medio, incluso, señaló que la aceptación de la ayuda alimentaria internacional, el trasladó a seis ejecutivos de Citgo de prisión a arresto domiciliario y la renovación de las autoridades del Consejo Nacional Electoral (CNE), se podrían interpretar como señales del Gobierno de Venezuela.
“Está claro que están tratando de obtener un alivio de las sanciones y que la administración de Biden se siente incómoda con la severidad de la política de sanciones. Pero existe una profunda desconfianza en el concepto de negociaciones y la gente no está dispuesta a volver a quemarse si no hay pruebas reales de concesiones políticas sobre el terreno”, dijo, por su parte, Cynthia Arnson, directora del Programa Latinoamericano del Wilson Center en Washington.