El presidente de EE. UU. prometió buena relaciones con los países del mundo, que quedaron rotas o deterioradas luego de la presidencia de Donald Trump.
“El mundo nos está mirando”, dijo Joe Biden, y agregó: “Este es el mensaje para aquellos que están más allá de nuestras fronteras: Estados Unidos se ha puesto a prueba y ahora somos más fuertes de lo que éramos”.
Luego, lanzó un parte de tranquilidad para varios líderes globales: “Vamos a reparar las alianzas y vamos a interactuar con el mundo nuevamente para cumplir no con los desafíos de ayer, sino con los de ahora y los del futuro”, señaló para dejar ver, sin mencionar nombres, que las relaciones exteriores de Estados Unidos no pasan por su mejor momento.
“Vamos a liderar no solo con el ejemplo sino con el poder que implica el ejemplo”, acotó, en contraposición al estilo beligerante y agresivo de Donald Trump, y siguió: “Seremos un fuerte y confiable socio para la paz, el progreso y la seguridad… un socio que brinda confianza”.
Donald Trump, presidente incendiario que lo quemó todo antes de irse
La ausencia de Trump en la investidura de Biden –el primer presidente saliente en 152 años que no asiste a la toma de posesión de su sucesor– reflejó el creciente aislamiento que ha vivido desde la insurrección de sus seguidores el 6 de enero, por la que el Senado está a punto de someterle a un segundo juicio político.
Fue un final explosivo para el extraordinario mandato de Trump, que ha dividido el país y al mundo como quizás ningún otro mandatario estadounidense y ha profundizado unas fracturas políticas y sociales que seguirán abiertas durante mucho tiempo.
Guiado toda su vida por una fuerte necesidad de aprobación, el mandatario dejó la piel en decenas de mítines durante una larga e intensa campaña, pero no logró revivir las opciones que tenía a principios de este año, cuando confiaba en una holgada reelección gracias al buen desempeño de la economía.
Desgastado por la cifra astronómica de muertes por COVID-19, la peor crisis económica del país desde la Gran Depresión y un movimiento popular contra el racismo, Trump se convirtió tras las elecciones de noviembre en el undécimo presidente de un solo mandato de la historia de EE. UU., algo que no ocurría desde la derrota de George H. W. Bush en 1992.
Sin embargo, se negó a aceptar el resultado de los comicios, y lanzó un desafío sin precedentes al proceso de transición que culminó en un episodio de violencia que ya es emblemático de su periodo en el poder.
Papa Francisco instó a Biden a fomentar la paz y la reconciliación
El prelado animó al nuevo presidente de Estados Unidos, Joe Biden, a fomentar “la reconciliación y la paz” tanto en su país como en todo el mundo, en un mensaje de felicitación por la toma de posesión de su cargo.
El mensaje del papa Francisco al presidente Biden
https://t.co/aWQaeDqGId pic.twitter.com/hyaBA3BH3v— CNN en Español (@CNNEE) January 20, 2021
“Pido a Dios, fuente de toda sabiduría y verdad, que guíe sus esfuerzos para fomentar el entendimiento, la reconciliación y la paz en Estados Unidos y entre las naciones del mundo a fin de promover el bien común universal”, se indica en el mensaje, dirigido a la Casa Blanca.
Como ya hiciera en 2016 con el mandatario saliente, Donald Trump, el pontífice en primer lugar le felicitó por su nombramiento como 46º presidente de los Estados Unidos y le trasladó sus “mejores deseos” durante su mandato.