El presidente de EE.UU., Joe Biden, ha confirmado la muerte del líder de Al Qaeda, Ayman al-Zawahiri, ocurrida el 30 de julio en Kabul, Afganistán, durante un ataque aéreo estadounidense.
Al-Zawahiri se escondía en una casa en la capital afgana, y en el momento del ataque el líder del grupo terrorista se encontraba en el balcón de la vivienda.
«Durante varios meses, nuestra confianza de que al-Zawahiri se encontraba en ese lugar, en Kabul, iba creciendo […]. Desde hace mucho tiempo lo veíamos en el balcón, contra el que finalmente se realizó el ataque», detalló una portavoz de la Casa Blanca, señalando que fueron lanzados dos misiles desde un dron.
Ayman al-Zawahiri, de 71 años, se hizo cargo de Al Qaeda tras la muerte de Osama bin Laden en 2011, y estaba en la lista de los terroristas más buscados del FBI, que ofrecía una recompensa de 25 millones de dólares por información que condujera a su ubicación.
El paradero del líder del grupo terrorista había sido durante mucho tiempo un misterio. Desde finales de 2020 se han difundido rumores de que había muerto, pero en los últimos meses apareció en unos videos criticando a los «enemigos del islam».