El expresidente Álvaro Uribe Vélez fue citado este viernes en la mañana a la audiencia de acusación que se suspendió hace ocho días, y que tendrá una nueva jornada que incluye resolver la nulidad del caso propuesta por la defensa.
La diligencia empezó a las 8:02 de la mañana, y tuvo como antesala un nuevo delito añadido contra el exjefe de Estado, por parte del fiscal Gilberto Villarreal, quien al escrito de acusación sumó el cargo de soborno.
Para el abogado Jaime Granados, defensor titular de Uribe, este caso tiene que anularse porque la Fiscalía al parecer incurrió en varias «imprecisiones». Según el penalista, no se puede avanzar al juicio porque su cliente no sabe de qué se está defendiendo», añadiendo que «no existe en realidad, a pesar de la homologación, una verdadera formulación de imputación».
Este expediente contra el también exsenador nació en 2018 cuando la Corte Suprema de Justicia le abrió una indagación previa porque al parecer envió a su abogado Diego Cadena a buscar testimonios en cárceles que lo favorecieran, no vinculándolo con nexos ilegales.
Con su renuncia al Senado, el proceso pasó al ente acusador, que en dos ocasiones intentó precluirlo, pero que con el fiscal Villarreal tuvo halló elementos que lo llevaron a llamar a juicio a Uribe.