El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, pidió hoy que se tomen “las medidas necesarias” para verificar si Venezuela está cumpliendo con el tratado de Tlatelolco para la desnuclearización de Latinoamérica y el Caribe.
En un comunicado, Almagro dijo tomar “nota con la más alta preocupación” de las noticias sobre la presencia en Venezuela de una escuadrilla de aviones militares rusos, entre ellos dos bombarderos estratégicos del tipo Tu-160, el más grande del mundo y con capacidad para transportar armas nucleares.
Ante esa situación, Almagro urgió al Organismo para la Proscripción de las Armas Nucleares en América Latina y el Caribe (OPANAL) a comprobar si Venezuela cumple con el tratado de Tlatelolco y asegurarse de que la comunidad internacional no está “en presencia de armas nucleares”.
El responsable de la OEA recordó que el artículo primero de ese tratado, del que Venezuela es parte, “prohíbe el recibo, almacenamiento o posesión de armas nucleares por sí misma o por terceros en su territorio”.
“Urgimos a los órganos establecidos en este acuerdo a que adopten las medidas necesarias para verificar el cumplimiento por parte de Venezuela de las obligaciones contraídas” y avise a la ONU y la OEA si determinan que en efecto hay una violación de las mismas, dijo Almagro.
Opinó, además, que “la presencia de esta misión militar extranjera viola la Constitución Nacional venezolana al no haber sido autorizada por la Asamblea Nacional”.
“Por lo tanto, consideramos semejante acto lesivo de la soberanía venezolana”, indicó el excanciller uruguayo.
“Del mismo modo, la Secretaría General (de la OEA) observa con extrema inquietud la participación de capacidades militares de potencias extrarregionales en el hemisferio fuera del marco constitucional de los países, así como de la transparencia y de confianza mutua que debe guiar estas actividades”, agregó Almagro.
El comunicado del secretario general de la OEA llegó poco después de que la Casa Blanca asegurase haber recibido garantías de Rusia de que las aeronaves abandonarán Venezuela el viernes.
“Hemos hablado con representantes de Rusia y sido informados de que sus aeronaves militares, que aterrizaron en Venezuela, saldrán del país el viernes y volverán a Rusia”, explicó Sarah Sanders, portavoz de la Casa Blanca, en un correo enviado a Efe.
El comunicado completo de la OEA:
Comunicado de la Secretaría General de la OEA sobre aviones militares rusos con posible capacidad nuclear en Venezuela
La Secretaría General de la OEA toma nota con la más alta preocupación de las noticias provenientes de Venezuela sobre la posibilidad de que aviones con capacidad de uso de armas nucleares provenientes de Rusia se encuentren en su territorio. La presencia de esta misión militar extranjera viola la Constitución Nacional venezolana al no haber sido autorizada por la Asamblea Nacional, como lo exige el artículo 187 párrafo 11. Por lo tanto, consideramos semejante acto lesivo de la soberania venezolana.
Asimismo, esta accion puede estar también en violación de normas fundamentales del derecho internacional. Venezuela es Estado parte del Tratado para la Proscripción de las Armas Nucleares en América Latina y el Caribe (“Tratado de Tlatelolco”), cuyo artículo primero prohíbe el recibo, almacenamiento o posesión de armas nucleares por sí misma o por terceros en su territorio. La adopción de este tratado fue un gran logro para América Latina y el Caribe, que nos convirtiera en la primera región libre de armamentos nucleares. Su violación es una seria amenaza a la paz y la seguridad internacionales.
Urgimos a los órganos establecidos en este acuerdo a que adopten las medidas necesarias para verificar el cumplimiento por parte de Venezuela de las obligaciones contraídas, asegurar de que no estamos en presencia de armas nucleares tales como definidas en el artículo 5 del Tratado de Tlatelolco, y, si se constatase la violación de las mismas, lo comuniquen inmediatamente tanto a las Naciones Unidas como a la OEA, como lo establece el artículo 21.
Del mismo modo, la Secretaría General observa con extrema inquietud la participación de capacidades militares de potencias extrarregionales en el Hemisferio fuera del marco constitucional de los países, así como de la transparencia y de confianza mutua que debe guiar estas actividades. Actitudes de estas características no contribuyen a la paz ni a la estabilidad continentales, valor supremo a preservar para la convivencia en la región.