El joven de 14 años fue arrestado cuando confundieron un reloj digital construido por él con una bomba. Barack Obama y Mark Zuckerberg destacaron su creatividad y quieren conocerlo
Los últimos días fueron una montaña rusa para Ahmed Mohamed, de 14 años. Después de ser arrestado por llevar a su escuela secundaria un reloj fabricado por él que las autoridades confundieron con una bomba, el joven musulmán será recibido nada menos que por el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, y por el fundador de Facebook, Mark Zuckerberg.
«Lindo reloj, Ahmed. ¿Quieres traerlo a la Casa Blanca?», escribió Obama en su cuenta de Twitter después de difundido el episodio. «Deberíamos incitar a más niños como tú a que les gusten las ciencias. Es lo que hace la grandeza de Estados Unidos», añadió.
«LINDO RELOJ, AHMED. ¿QUIERES TRAERLO A LA CASA BLANCA?»
La reacción del creador de la red social más popular del planeta fue similar: «Tener la capacidad y la ambición de construir algo así debería generar aplausos, no arrestos. El futuro pertenece a las personas como Ahmed».
Y en un mensaje publicado en su cuenta en la red social añadió: «Ahmed, si alguna vez quieres venir a Facebook, estaré encantado de conocerte. Sigue construyendo».
Cool clock, Ahmed. Want to bring it to the White House? We should inspire more kids like you to like science. It's what makes America great.
— President Obama (@POTUS) September 16, 2015
Ahmed Mohamed, alumno de tercer año de liceo, llevó el lunes un pequeño dispositivo casero, compuesto por una pantalla digital y un circuito electrónico, con el fin de mostrárselo al profesor de tecnología.
«AHMED, SI ALGUNA VEZ QUIERES VENIR A FACEBOOK, ESTARÉ ENCANTADO DE CONOCERTE. SIGUE CONSTRUYENDO»
Pero el aparato sonó mientras su grupo estaba en el curso de inglés, por lo que el profesor se lo confiscó.
«El director y policías me llevaron a un salón donde fui interrogado por cinco policías, me cachearon y me sacaron mi tablet y mi invento», relató el adolescente al diario Dallas Morning News.
«Luego me llevaron a un centro de detención juvenil, donde me cachearon, me tomaron las huellas digitales y me sacaron fotos«, añadió el ingenioso adolescente, entrevistado en la habitación de su casa, donde tiene muchos circuitos electrónicos arriba de su escritorio.