El nobel abandonó las comodidades que obtenía en las instalaciones del Hotel Eurobuilding para vivir junto al nuevo gran amor de su vida.
Una vez que la relación entre Mario Vargas Llosa e Isabel Preysler se hizo pública, el nobel admitió que no tenía mucho sentido que vivieran separados y es por eso que ha decidido abandonar su suite del Hotel Eurobuilding, para trasladarse a la lujosa vivienda que tienen en la urbanización de Puerta de Hierro.
Según reseñó El Confidencial, allí permanecerán juntos hasta que comience a dar clases magistrales como profesor invitado en la Universidad de Princeton hasta diciembre.
“Mario volverá a su rutina, que para él es imprescindible a la hora de trabajar. La perdió ante tanto cambio radical en su vida. Es un hombre de horarios y de costumbres que hasta ahora llevaba Patricia. Con una agenda que no le gustaba que nadie la cambiara. Su secretaria, Fiorella, ya no está con el”, expresaron las amistades del escritor.
Pero ahora Vargas Llosa está en otra situación y seguramente, si su nueva pareja no hubiera sido Isabel Presyler no habría tenido necesidad de marcharse a un hotel, como hizo.
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