La celebridad Kim Kardashian sorprendió con una petición al abogar por la liberación de los hermanos Erik y Kyle Menéndez, cuyo caso ha vuelto a salir a la palestra pública debido a la serie que estrenó Netflix y el documental que pronto verá a la luz, alegando además que “no son unos monstruos”.
En una carta que publicó en NBC News, la socialité comentó que los visitó en la prisión. Tras verlos, considera que es hora de que “se haga justicia” con ellos y haya “un nuevo juicio”. A ambos los condenaron por asesinar a sus padres José y Kitty Menéndez en 1989.
“Todos somos productos de nuestras experiencias, moldean quienes somos y quienes seremos. Fisiológicamente y psicológicamente, el tiempo nos cambia, y dudo que alguien afirme ser la misma persona que era a los 18 años. Yo sé que yo no lo soy”, argumentó Kardashian, quien estudió leyes.
En sus palabras, los hermanos Menéndez afirmaron que fueron “sexualmente, físicamente y emocionalmente abusados durante años por sus padres». Asimismo, mencionó que Erik dijo tener 6 años cuando su padre comenzó a violarlo.
«Juicio injusto»
A consideración de la empresaria, el primer juicio de los hermanos fue “injusto”. La hija del fallecido abogado Robert Kardashian cree que no se incluyó evidencia clave de los abusos que sufrieron.
«El caso de Erik y Lyle se convirtió en entretenimiento para la nación. Su sufrimiento y sus historias de abuso fueron ridiculizados en viñetas en Saturday Night Live. Los medios convirtieron a los hermanos en monstruos», añadió Kim.
Menciona la celebridad que las víctimas de abuso sexual, sobre todo los hombres, eran tratados “injustamente” cuando los hermanos Menéndez pasaron a juicio. A su parecer, si hubiesen sido “las hermanas Menéndez”, no les hubiesen dado tal sentencia.
«Yo he pasado tiempo con Lyle y Erik. No son monstruos», agregó.
Al mismo tiempo, los describe como “hombres nobles y honestos”. Aunque aclara que no excusa los asesinatos, pide reabrir su caso.
“Se lo debemos a esos niñitos que perdieron su infancia, que nunca tuvieron la oportunidad de ser escuchados, ayudados o salvados”, concluyó.
Cabe mencionar que esta semana se conoció que el fiscal del distrito del condado de Los Ángeles está revisando nuevas pruebas, al tiempo que enfatizó que es posible que se reabra.