La animadora venezolana Kerly Ruiz compartió recientemente detalles íntimos sobre cómo el apoyo de sus padres fue crucial durante uno de los momentos más difíciles de su vida: su divorcio de Irrael Gómez y su posterior traslado a Estados Unidos.
«El apoyo de mi familia fue súper importante, especialmente porque me divorcié y al mismo tiempo tuve que adaptarme a vivir en otro país», confesó Ruiz durante una entrevista en Univisión.
La presentadora explicó que esta doble transición hizo el proceso aún más complejo, ya que no solo enfrentaba el dolor de una separación conyugal, sino también los desafíos de establecerse en un nuevo lugar.
La animadora, actual conductora del programa ‘Siéntese Quien Pueda’, destacó especialmente la ayuda de sus padres en la crianza de su hija Gail. «Ellos se vinieron conmigo y me han ayudado muchísimo con mi hija. Somos mujeres trabajadoras que pasamos el día ocupadas, pero yo no soy de dejar a mi hija con una niñera. Prefiero que esté con sus abuelos», expresó.
Ruiz ha mencionado en anteriores ocasiones la estrecha relación que existe entre su hija y su madre, un vínculo que considera fundamental para el desarrollo emocional de la pequeña.
La historia de amor entre Kerly Ruiz e Irrael Gómez comenzó con un romance que culminó en una boda celebrada en Miami el 14 de febrero de 2015. Dos años más tarde, la pareja recibió con alegría a su hija Gail Gabriela.
Sin embargo, el matrimonio no logró superar las dificultades y en agosto de 2017 anunciaron su separación.
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En aquel entonces, Kerly Ruiz escribió en Instagram la felicidad de los hijos es lo más importante para los padres y agregó: «El mantenimiento del hogar también lo es, pero cuando hay cosas que afectan la vida en común, que no se superan por más que se intenten, hay que pensar primero en la felicidad de nuestros hijos, y en su tranquilidad. Por eso, hoy decido comunicarles a todos mis seguidores, la decisión firme de divorciarme. Pido respeto y consideración. Somos buenos padres y buenas personas»,
Fue entonces cuando Ruiz tomó la decisión de empezar una nueva vida en Estados Unidos, llevándose consigo a su pequeña hija y contando con el apoyo de sus padres.