Muchas polémicas se han desatado entre la relación de Megan Markle y su padre Thomas. En diversas ocasiones ha criticado a su hija y su nueva familia, revelando detalles íntimos de su vida sin su consentimiento que han dañado la relación.
“Por el momento no hay ninguna posibilidad de una reconciliación“. “No hay ninguna posibilidad ya que él ha sido una vergüenza absoluta para ella”.
Thomas Markle pidió disculpas por las fotos publicadas con los paparazzi. Sin embargo, los conflictos entre padre e hija no son nuevos.
Según el testimonio de una amiga allegada a la familia mencionó que desde hace mucho tiempo que tienen problemas, desde antes de que conociera al príncipe.
A diferencia de lo que muchos creen, la reina y el resto de la familia real británica, quienes también han sido blanco de los comentarios del suegro del príncipe Harry tampoco le han dado mucha importancia al tema.
La familia real no está tan enojada como todos piensan. Nada de lo que ellos puedan decir (la familia Markle) tiene ningún tipo de repercusión real y ellos están concentrados en asuntos más importantes, explicó la fuente.
Thomas manifestó que seguirá hablando con la prensa hasta que consiga comunicarse con su hija, pero mientras continúe con dicha postura menos conseguirá su objetivo ni recibirá la visita de Meghan durante su viaje a los Estados Unidos en las próximas semanas advirtió al amiga de la duquesa.
Un informante vinculado al palacio, dijo en un reportaje publicado en The Mirror que la familia real está considerando tres opciones para silenciar a Thomas Markle.
Como primera opción, Meghan podría contactar a su padre y pedirle directamente que deje de lastimarla, pero por el momento ha decidido que es mejor cortar todo tipo de comunicación con él, dijo la fuente.
Otra opción es que un intermediario se reúna con él y le pida que pare de hacer comentarios dolorosos; y la última posibilidad sería cortar todo tipo de relación definitivamente con la esperanza de que eso lo detenga pero nadie sabe cómo puede reaccionar.