Mark Swed, crítico de música para Los Angeles Times, publicó un artículo en el que narró el concierto que dirigió Gustavo Dudamel, reconocido músico venezolano que dedicó la presentación a Armando Cañizales, joven músico que fue asesinado en el marco de las protestas pacíficas convocadas por líderes de la oposición.
Dudamel dirigió la primera sinfonía de Schubert, una obra que nunca antes había interpretado la Filarmónica de Los Ángeles.
Nadie hace historia con las primeras sinfonías de Schubert. El mismo Schubert no lo hizo. Pero Gustavo Dudamel lo logró en la noche del viernes en el Walt Disney Concert Hall.
Se acercó al escenario con una brusquedad poco característica de él -sin sonrisa. El director de la Filarmónica de Los Ángeles observó por un momento a la orquesta y luego se dirigió a la audiencia. Mencionó a Armando Cañizales, joven violista que pertenecía a El Sistema de Orquestas de Venezuela, quien fue asesinado en las protestas opositoras que se convocaron en rechazo al Gobierno de Nicolás Maduro.
“Tocamos por nuestros niños”, expresó, “para construir un mejor futuro para ellos con paz y amor”.
La audiencia le dio una ovación de pie. Detrás del escenario se veía una bandera venezolana y desde el balcón se oían gritos de “Viva Venezuela”.
El mensaje era claro: Esto es lo que significa masacrar a los jóvenes.
Después de haber estado un largo tiempo bajo el control que mantenía el Gobierno venezolano sobre El Sistema, Dudamel empezó a tomar posición sobre la situación del país. Gran parte de la violencia que condena es ejercida por grupos de oficialistas. Sin embargo, muchas personas han criticado a Dudamel por considerar que sus acciones han llegado “un poco” demasiado tarde. Algunos incluso han llegado tan lejos como para culpar al director de ser cómplice de la violencia al no haber denunciado la mano autocrática que alimenta a cientos de miles de estudiantes de El Sistema.
Lo que resulta aún más resaltante es que, dejando de lado la crisis de Venezuela, este 2017 podría parecer un cuento de hadas para Dudamel. Él comenzó el año como el músico más joven en ser invitado a dirigir la reconocida Filarmónica de Viena en sus presentaciones de Año Nuevo, algo que él hizo con gusto, llevando alegría al mundo.
Unos pocos días después, Dudamel y María Valverde, destacada actriz de películas españolas, se casaron en una ceremonia en Las Vegas, un evento sobre el que la pareja se mantuvo reservada (lo siento, Gustavo, pero tarde o temprano nos íbamos a enterar).
“La gente construye muros”, indicó Dudamel. “Nosotros hacemos puentes. ¿Es esa la razón por la que dicen que no hablamos de política? Sí, hablamos solo de las cosas que hacemos a través de la música. El futuro de México y el de Los Ángeles no están desconectados”, acotó.
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