A casi 40 años de la muerte de la Miss Venezuela 1980, Maye Brant salió a la luz una polémica que involucra al periodista venezolano, Luis Olavarrieta.
A través de la red social de Twitter una usuaria identificada como @seishi01, supuesta sobrina de Brant, indicó que Olavarrieta se encargó de manipular los testimonios de su madre.
https://twitter.com/putefica/status/1443644314832224258?ref_src=twsrc%5Etfw%7Ctwcamp%5Etweetembed%7Ctwterm%5E1443644314832224258%7Ctwgr%5E%7Ctwcon%5Es1_&ref_url=https%3A%2F%2Fwww.elfarandi.com%2F2021%2F10%2F02%2Fmentiroso-luis-olavarrieta-manipular-informacion%2F
“Luis Olavarrieta es un manipulador y mentiroso. Llamó a mi madre para hacer una entrevista sobre su hermana fallecida y manipuló todas las respuestas para culpabilizar a la prensa y no a Simancas, el hijo de puta que le destruyó la vida a los 20 años”, se puede leer en el tweet.
Pónganse de acuerdo. Jean Carlos aseveró lo contrario. Hace 8 años, se hizo un homenaje a una mujer inigualable, no a tu ego y a tus medias verdades. Yo no viví esa época, se documentó y allí están las conclusiones de los especialistas, no son las mías.
— Luis Olavarrieta (@LuisOlavarrieta) September 30, 2021
También mencionó que Olavarrieta llevó el encuentro por otro lado que no era la supuesta infidelidad que recibió Maye Brandt por parte de Simancas con Yanis Chimaras.
“Lo único que quería era limpiar la imagen de Jean Carlos Simancas, 12 años mayor que ella, mi tía lo había encontrado en diferentes ocasiones con su amante”, indicó.
El 8 de mayo del año 1980 aquella bella joven que se alzaba con el título de Miss Venezuela decidiría ponerle fin a su vida dos años más tarde. La siempre bella y recordada María Xavier Brandt
Angulo, más conocida como Maye Brandt, fue una modelo venezolana nacida el 28 de abril de 1961 en la ciudad de Caracas. Con una estatura de 1.76 cm y sus ojos verdes, Maye Brandt conquistó al jurado del magno evento de la belleza nacional, ganando así el título de belleza más importante del país.
Para aquel entonces, toda Venezuela sería testigo de lo que ocurrió esa noche tan linda, pues en primer lugar, el año anterior y por primera vez, una venezolana ganaba el Miss Universo, nuestra Maritza Sayalero y se anhelaba saber quién sería su sucesora.
Maye Brandt representaba al estado Lara, descrita en la pasarela como “la morena de ojos verdes y figura de reina’’, tenía unas medidas casi perfectas de 90-59-90 y un rostro que reflejaba una ingenuidad hipnotizante. Desfile tras desfile, la caraqueña sobresalía por su naturalidad y juventud, confrontando en cierto modo, la exuberancia y sensualidad de Hilda Abrahanz, la favorita.
Fue por la picardía de su respuesta en la ronda de preguntas, que sumó los puntos necesarios para ser la ganadora. Coronada por la Miss Universo 1979, esta mujer estaba comenzando a vivir un sueño.
Todos amaban a Maye, era sin duda la reina más bella que había pasado por el certamen liderado por el Zar de la Belleza, Osmel Sousa y se había ganado el apoyo del pueblo para la época. Brandt fue imagen de diversas campañas publicitarias y aunque quería estudiar Comunicación Social, el modelaje era su pasión.
La Policía Metropolitana de Caracas tuvo el gusto de homenajearla nombrandola Agente Femenino Honoraria de su cuerpo policial, además de obsequiarle el uniforme y arma de reglamento. Las expectativas estaban puestas en la exótica morena cuando le tocó viajar a la ciudad de Seúl, en Corea donde representaría a Venezuela y se esperaba que lograra la hazaña de volver a ser coronada por su compatriota, sin embargo, poco deslumbró en el certamen y no quedó dentro del cuadro de 10 semifinalistas.
La prensa las tenía en salsa y comenzaron a relucir informaciones personales, muchas inventadas y otras muy ciertas que en algún momento sobrecargaría el límite de ambas, pero significativamente era a Maye a quien le caería la peor parte.