Del otro lado del teléfono suena la voz nerviosa de Valeria Ortiz. Su , Paola Villanueva, siente la preocupación en cada letra del “aló, bendición”.
Le responde con calma mientras varios pensamientos chocan en su mente. Hace dos años que montó a su hija en el avión rumbo a España donde inició sus estudios de Ciencias Biomédicas. iba bien hasta que los puntuales dólares no llegaron. “Mamá no tengo el dinero en la cuenta”, dijo la joven de 21 años y dejó al descubierto su angustia. Su remesa está paralizada junto a la del resto de venezolanos que logran subsistir en otras tierras.
La respuesta del asesor de negocios de la de cambio fue clara: El Central de Venezuela (BCV) no liberó las divisas en septiembre. Eso aclaró las dudas de Paola. A principios de cada mes hace el depósito de tres mil 100 bolívares correspondientes a los 166 dólares a tasa Sicad de 13,5 bolívares, con comisión incluida. En un par de semanas debía recibir un mensaje de texto y correo electrónico con la aprobación. Pero esta vez fue diferente. A su bandeja llegó: Estimado cliente, el retraso en la última remesa tramitada con nosotros, es debido a la espera de la autorización por parte de los entes oficiales.
Esto sucede en la casa de cambio donde Paola hace el trámite y en el resto que presta el servicio. “Desde el mes pasado no se reciben aprobaciones del BCV. Se conoció que solo dos bancos privados del país aún trabajan con esta modalidad, el resto dejó de hacerlo por la deuda que mantiene el Ejecutivo. En el Banco de Venezuela sólo tramitan remesas en casos de alguna emergencia de salud.
Fuente: El Carabobeño