Consecomercio denunció que pequeños comercios cerrarán al no poder pagar a proveedores y bancos debido al decomiso de productos o venta a precios de fiscalización
Dulce María Rodríguez/El Nacional
Luego de que el vicepresidente de la República, Jorge Arreaza, en compañía del superintendente nacional para la defensa de los derechos socioeconómicos, César Ferrer, anunció el miércoles pasado que el precio máximo de venta al público del cartón de huevos de 30 unidades se fijaba en 420 bolívares, el alimento desapareció de los supermercados.
Ayer en varios establecimientos de la red pública y privada no había huevos. Solo en algunos privados se conseguían huevos de codorniz en 680,80 bolívares la caja de 24 unidades “El jueves se armó una golpiza entre mujeres por los cartones de huevos, fue impresionante”, dijo un vendedor de un supermercado privado que está ubicado en Las Mercedes.
En el Abasto Bicentenario de la misma zona, la mayoría de los estantes estaban vacíos y los trabajadores informaron que el jueves se llevaron los últimos cartones de 12 unidades en 160 bolívares. “Los huevos eran tan pequeños que se necesitaría todo el cartón para una tortilla”, señaló una de las trabajadoras.
Ana Ramirez, vecina de la Candelaria, indicó que compró un cartón de huevos de 30 unidades en 1.200 bolívares en el mercado abierto de la avenida Panteón. Contó que a las 7:00 am ya no quedaban huevos porque la vendedora solo tenia disponible una caja. “Lo compré sin ver precios porque sé que no hay”.
Carne porcina. El sábado el Comando de Precios Justos estableció nuevos precios para los cortes de carne de cerdo. El kilo de pernil costará 585,96 bolívares y el de cerdo en pie 240 bolívares en las cadenas de comercialización privadas.
Arreaza aseveró que el rubro sería expendido a un precio inferior en la red pública de alimentos. Sin embargo, ayer no estuvo a la venta. En los abastos Bicentenario de Las Mercedes y Macaracuay ni en el Pdval de Boleíta, vendieron pernil. Las neveras estaban vacías. Trabajadores indicaron que llegaría está semana. Tampoco en tres cadenas de supermercados privadas del este de Caracas había pernil.
Miguel Pérez, consumidor, refirió que el domingo 8 compró en Makro de La Urbina una paleta de cochino a precio regulado: “Hice dos horas de cola por el pernil, pero cuando llegó mi turno se había acabado y solo quedaba paletas, igual me la lleve porque costaba 427 bolívares el kilo”.
Contra comerciantes. Consecomercio advirtió sobre “la desaparición en masa de pequeños comercios al no poder afrontar las obligaciones de pago con proveedores y entidades financieras, como consecuencia de las medidas de decomiso o ventas a precios de fiscalización”.
Denunció que “la administración de la Ley de Precios Justos se ha convertido en una especie de acción discrecional contra los comerciantes y expendedores de servicios a nivel nacional”.
El gremio indicó que el procedimiento se está siguiendo a partir del desconocimiento del Estado de Derecho. Afirmaron que los empresarios no son atendidos ni respetados cuando presentan las facturas que demuestran que están actuando apegados a la ley. Además, a los bienes objeto de las inspecciones les fijan precios a capricho por debajo de los costos de compra, y “se obliga a venderlos de acuerdo con la voluntad de los inspectores porque, supuestamente, así lo determina la ley”, dijeron en nota de prensa.
Consecomercio alertó que con la desaparición de los comercios “las opciones de compra de productos de los consumidores ya no será haciendo colas sino negociando con verdaderas mafias que han ido promoviendo mercados negros a precios de oportunidad, en un país donde los niveles de escasez de productos básicos supera 70%”.
LA CIFRA
420 bolívares es el precio máximo de venta al público que el gobierno fijó para el cartón de huevos de 30 unidades
