La hiperinflación en Venezuela en noviembre alcanzó niveles récord con un alza interanual de los precios de 1.299.724%, indicó una medición de la Asamblea Nacional, controlada por la oposición, que lleva estadísticas ante la ausencia de cifras oficiales.
“Nunca en un país de Latinoamérica se había llegado a esta cifra. Son los récords de Nicolás Maduro: tragedia y miseria”, dijo en rueda de prensa Rafael Guzmán, presidente de la Comisión de Finanzas del Legislativo.
De acuerdo con la cámara, el costo de vida ha escalado 702.521% desde el pasado 1 de enero, en una espiral que según el Fondo Monetario Internacional llevará la inflación a 1.350.000% este año y a 10.000.000% en el 2019.
El Parlamento y expertos han señalado que el país petrolero entró en hiperinflación en noviembre del 2017.
Los elevados precios en el país, que atraviesa su quinto año de recesión, impactan en el ingreso de los venezolanos y ha contribuido a que emigren unas tres millones de personas, apuntó la Organización de las Naciones Unidas.
En setiembre, la inflación llegó a un récord de 233,3%, pero en octubre y noviembre el alza de los precios se desaceleró, lo que parlamentarios atribuyeron al comportamiento del dólar paralelo, cuya depreciación ha sido menor. Aún así, los precios en noviembre subieron 144,2%, es decir, más que se duplicaron.
Desde hace 15 años en Venezuela existe un férreo control de cambio, pero el sistema oficial de divisas no asigna dólares suficientes a los privados para importar materias primas y equipos, y aquellos que operan en el país tienen que recurrir al mercado paralelo, lo que golpea los precios.
“Por el comportamiento que tienen los precios, no descartamos que al cierre del 2018 la inflación sea cercana a tres millones por ciento”, destacó Ángel Alvarado, diputado a la An y economista, quien agregó que la tasa diaria de inflación es de 3%.
El presidente Nicolás Maduro culpa de la crisis a una “guerra económica” de Estados Unidos y de los privados. Críticos y analistas dicen que el modelo de controles del gobierno ha profundizado las distorsiones.
Desde hace tres años, el Banco Central de Venezuela no entrega cifras del desempeño de la economía, la inflación y la balanza de pagos. A fines de noviembre, Maduro subió el salario mínimo y otorgó bonos a empleados y seguidores del oficialismo.