Según cifras del Banco Central la inflación en venezuela supera el 180%, una cifra alta y negativa, pero la realidad de los venezolanos parece ser mucho peor. Cada día cosas tan sencillas como una caja de colores se convierten en un lujo.
El Nacional reseña que el costo de una caja de colores de buena marca inicia en Bs. 2.000 y pueden llegar a Bs.100.000.
Ante un sueldo mínimo de 11.578 bolívares mensuales, la pérdida del poder adquisitivo es clara; y este artículo escolar Prismacolor o Faber-Castell que se podía comprar, incluso de forma recurrente, es ahora un privilegio que pocos podrán tener.
SM