Gobierno ‘reajusta’ e inicia nueva apertura petrolera
El Gobierno nacional ya se encaminó a “reformular” y “flexibilizar” las actuales reglas del negocio de extracción de crudo, a toda costa, la abrupta caída de la producción de Pdvsa y que ya ronda, según datos de la Opep, en apenas 1,2 millones de barriles/día. Los expertos apuntan que el país está en puertas de una nueva “apertura” petrolera, pero sin “bombos” y “platillos”.
El Ejecutivo, en los últimos meses, ha dado claras señales que las reglas están cambiando para las transnacionales. Esta semana, el propio presidente Nicolás Maduro, en una rueda de prensa, informó sobre la venta del 9,9% de sus acciones en una empresa mixta petrolera a la estatal china Cnpc, como parte de un programa que busca incrementar el bombeo de crudo.
La negociación se concretó durante un reciente viaje a Pekín que hizo el mandatario venezolano con la idea de conseguir nuevos fondos. Hasta ahora, el país se había reservado el control del 60% de las acciones en las empresas mixtas que junto a socias extranjeras operaban los campos petroleros, pero con este acuerdo, Cnpc pasó a ser dueña del 49,9% de Sinovensa.
En 2017, el Ejecutivo también vendió a la rusa Rosneft, 26% de sus acciones en la empresa mixta Petromonagas, con la cual la petrolera aumentó su participación de 16,6% a un máximo de 40%. Pdvsa también negoció con Chevron para vender 10% de sus acciones en Petropiar, quedando en 40% su cuota accionaria.
Otra señal clara de “cambios” en el negocio de la extracción de crudo se observó en agosto pasado. En esa oportunidad, Maduro firmó nuevos acuerdos con empresas de “servicios” a las que se les asignaron campos petroleras para incrementar la producción de crudo a cambio de incentivos, un esquema altamente criticado bajo el gobierno del fallecido presidente Hugo Chávez.
A lo anterior, también se le suma la exoneración del pago del Impuesto Sobre la Renta (Islr) a las empresas filiales y mixtas, relacionadas con la explotación petrolera, domiciliadas o no en Venezuela. Así quedó establecido en la Gaceta Oficial N° 41.452.
Expertos en el área señalaron, a este rotativo, que el país está cambiando el viejo esquema de explotación petrolera por un “modelo más atractivo” y “accesible” para los inversionistas, que son los que cuentan con los millonarios recursos que tanto hacen falta en el sector de los hidrocarburos.
“Se están dando algunos pasos, algunas señales. El Gobierno está cediendo para atraer a las trasnacionales, Pdvsa sola no puede levantar la producción (…) llevarla a por lo menos los 3 millones de b/d en menos de dos años, es casi imposible”, aseguró el analista petrolero, José Sangronis.
Agregó que “aún falta una pieza importante en todo este plan. No se trata de cambiar el 303 de la Constitución, que habla de nuestra soberanía petrolera (…) para que los inversionistas fuertes retornen al país se debe modificar la Ley de Hidrocarburos, sobretodo los artículos relacionados con la participación accionaria de las empresas mixtas en los campos. Que las mismas tengan la mayoría accionaria. Y eso lo puede hacer la propia Asamblea Nacional Constituyente”.
“Que el Gobierno esté vendiendo acciones de su participación en las mixtas es otra clara señal que está dispuesto a sacrificar parte de su negocio, de sus joyas para que alguien lo ayude a aumentar la producción de barriles y más ahora que los precios (del crudo) están entre el rango de los 70 u 80 dólares”, apuntó.
A principios de mes, David Paravisini y Hermann Escarrá, diputados a la ANC, indicaron a la agencia Reuters que la reforma constitucional en la que trabajan propondrá una nueva “apertura petrolera”.
La decisión de mejorar las condiciones de negocio a empresas petroleras extranjeras buscaría atraer capitales para incrementar la producción de crudo de Pdvsa, la cual genera el 95% de las divisas que ingresan al país.
“Las empresas mixtas incluso se les pueden mejorar las condiciones. Hay que buscar mecanismos provisionales mientras se consiguen los recursos. Hay que tener en cuenta la situación económica del país, necesitas inversiones para recuperar la producción”, indicó Paravisini.
Por su parte, el diputado Escarrá acotó que cualquier apertura siempre estará condicionada a que el Estado posea la “mayoría accionaria” de las empresas mixtas que pudiesen crearse en conjunto con capital extranjero.
“Hay una apertura, siempre con el Estado y que tenga la mayoría (accionaria), no negado a la inversión extranjera”, sentenció.
Esto también lo comparte el analista en el sector energético, José Rafael Domínguez. “Las reglas tienen que cambiar, no se pueden seguir postergando porque vamos rumbo al millón de barriles diarios, la cifra más baja en la historia del país desde 1940. La Ley Orgánica de Hidrocarburos, en su punto sobre las empresas mixtas y su composición accionaria, debe reformularse para atraer más inversiones”, opinó.
El economista y presidente de Datanálisis, Luis Vicente León, indicó en su cuenta en Instagram que el tiempo juega en contra del Ejecutivo si no realiza cambios drásticos.
“La economía tiende a deteriorarse más y el gobierno deberá flexibilizarse (…). El tiempo es finito. La economía tiende a colapsar y es entonces cuando no les quedará más remedio que abrirse. Hay algunas señales: compromiso de seriedad fiscal, libertad cambiaría, apertura de la actividad petrolera y minera, participación intensa del sector privado y recursos de apoyo internacional. O haces lo correcto o no sales de la crisis”, destacó León.
Otros como el exministro de Petróleo y expresidente de Pdvsa, Rafael Ramírez, califican como un “error” ceder espacios ya ganados a las transnacionales, pues sería volver al viejo mecanismo entreguista de la apertura petrolera de la década de los 90.
“De manera abierta e ilegal, sin ningún respeto ni por la Constitución, ni por la Ley Orgánica de Hidrocarburos, el gobierno de Maduro se ha concentrado en desmontar la política petrolera del Presidente Chávez. Maduro entrega el Gas y el Petróleo, privatiza Pdvsa y ya ni siquiera, siente que tiene que justificar nada”, aseguró en un artículo personal “Traición a la Patria”.
Agregó, en su análisis, que “el gobierno entregó a empresas europeas el gas que descubrimos y certificamos en el Golfo de Venezuela, el Perla 3X. Ese gas se lo llevan las transnacionales, no apuntalará el desarrollo del país, ni la crisis energética en el occidente. Luego entregó el gas del Proyecto Mariscal Sucre a empresas rusas”.
“Ahora le tocó al grueso de la actividad petrolera. Maduro (…) ya entregó, a las llamadas empresas prestadoras de servicios, las actividades primarias: exploración y producción de petróleo. Ha hecho una mala copia de los Convenios Operativos de Luis Giusti. Nadie ha visto los acuerdos, nadie los conoce, así como, nadie conocía los contratos de los convenios operativos”, señaló Ramírez.
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