Trascendió que uno de los principales “cuellos de botella” en las conversaciones entre el Gobierno y el sector productivo privado que se realizan desde el pasado 11 de septiembre, es que el tope del sistema de bandas trazado por el Ejecutivo está rezagado respecto a la estructura de costos de productores primarios e industria
Ivonne Ayala/EU
El Ejecutivo y los representantes del sector productivo privado no alcanzan un acuerdo de precios, debido a la diferencia que existe entre la estructura de costos de las distintas familias de rubros vinculadas al Plan 50, y la banda que maneja el Gobierno para fijar los montos que han de percibir los productores primarios y la industria.
Según trascendió, la resistencia de industriales y productores radica en que el dólar no oficial sigue impactando esta cadena.
Esta semana, el Ministerio de Finanzas sostuvo un encuentro de trabajo con representantes de empresas privadas y públicas adscritas al sector absorbente y pañales.
Fueron convocadas aquellas que cuentan con materia prima: Procter and Gamble, Pharsana, Guayuco y Cacique Maracay (antigua Kimberly Clark), mas no se logró un acuerdo en firme por cuanto, según se conoció, los topes de las bandas de precios estaban rezagados respecto al costo de producción por unidad.
Este jueves se desarrollaron en el Ministerio de Agricultura nuevas reuniones técnicas con el sector oleaginosas y el de leguminosas.
Se conoció que “uno de los planteamientos que se ventiló en la reunión de leguminosas fue conciliar un precio promedio entre el valor “bachaqueado” de los insumos, y el oficial al que se venden los fertilizantes, agroquímicos y semillas en Agropatria.
Se dijo que la urgencia de los ciclos de siembra, orilla muchas veces a los productores a comprar los insumos a precio no oficial porque esta empresa de suministro de insumos agrícolas, no se da abasto.