Cosas extrañas comienzan a suceder en el oficialismo, y por qué no decirlo, también en el país. Primero, la “siniestra” foto en la que aparece Nicolás Maduro en Turquía con unos cachos.
Y ahora, la reciente y polémica sentencia del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) sobre el Presupuesto Nacional 2017, donde-presuntamente-se establece que dicho presupuesto debe ser remitido por el Presidente Nicolás Maduro ante la Sala Constitucional y no ante la Asamblea Nacional como establece la Constitución. Aparece como una sentencia fantasma, o una ilusión, como sino existiese.
Es decir, la sentencia dictada por el TSJ no aparece en los archivos del portal web del Poder Judicial. Solo aparece un documento con error. Y solo hay un sinfín de códigos que imposibilitan la lectura.
Cualquier supersticioso puede considerar este caso como una señal, porque a pesar de las artimañas del Poder Judicial, las cosas no están saliendo bien, sino todo lo contrario.
Si quieres verlo por ti mismo, dale click aquí. Y para entrar en la página oficial del TSJ, entra aquí.
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