El economista Leonardo Buniak, magíster en economía internacional, especialista en Finanzas Internacionales y calificador de riesgo bancario, considera que con la medida de reformar al encaje legal bancario, se busca “atenuar el impacto de la recesión” en el marco de la pandemia de coronavirus.
Subrayó que ante la pronosticada caída de la economía mundial de 5 dígitos y América Latina con un pronóstico de contracción de 9 % “los gobiernos del mundo han diseñado unos paquetes de estímulos fiscales y monetarios para poder quebrar esas expectativas de contracción”, dijo en entrevista a Eduardo Rodríguez en el programa A Tiempo de Unión Radio.
Destacó que en todos los países de la región se han lanzado “programas de estímulos fiscales acompañados de una política monetaria acomodaticia que intenta crear condiciones financieras para que el crédito bancario genere crecimiento y empleo para atenuar la recesión”.
Puntualizó que el BCV debería hacer lo que ha hecho toda la banca latinoamericana que “es llevar la tasa de encaje a nivel de 11 %, liberar esos recursos y crear un marco de política económica para generar confianza”.
Ante los efectos económicos generados en el país por el confinamiento, “el sector productivo ha venido pidiendo al gobierno diferir las obligaciones fiscales y la flexibilización del encaje legal para que la banca regrese a prestar” para financiar el crédito al consumo y que los venezolanos volvamos a tener una tarjeta de crédito para consumir y gastar.
Mediante esta flexibilización del encaje bancario, anunciada por el Banco Central de Venezuela –BCV-, supuestamente “va a otorgar una especie de descuento semanal de Bs 30 billones”.
Advirtió que con la nueva medida “no se ha disminuido la tasa del encaje legal, está igual en 93% de los depósitos captados” simplemente se hará ese descuento semanal para que la banca pueda cubrir el déficit de unos Bs 19 billones y lo que sobra es lo que se prestará a la gente, es decir no son los Bs 30 billones, sino unos Bs 10 para prestar y eso se tiene que distribuir en toda la banca venezolana.
La banca pública concentra más de 50 % de los depósitos y, si decide no prestar como no lo ha hecho hasta ahora, el impacto en el crédito va a ser muy pequeño “olvídate la reactivación de la tarjetas de crédito”.
“Lo que habrá es una dinamización muy pequeña en el crédito comercial indexado en el dólar. El impacto en la actividad productiva no se va a ver, pero si habrá presiones en el mercado cambiario porque quien consiga un crédito va a hacer cobertura, comprar dólares quizás para importar”, añadió.
Lamentó que actualmente la banca nacional sufra de “raquitismo financiero.
Hoy Venezuela tiene la cartera de crédito más pequeña de América Latina y una agencia de un banco en Colombia tiene una cartera crediticia más grande que toda la de la banca del país”.