Después de cinco aguerridas fechas de la 62 Serie del Caribe, los Tomateros de Culiacán (México) se medirán con los Cardenales de Lara (Venezuela) en la primera semifinal el jueves en el Estadio Hiram Bithorn.
Ambas escuadras concluyeron la fase clasificatoria con marca de 4-1.
Los Tomateros han dependido de un fuerte ataque ofensivo para llegar hasta este punto. El equipo mexicano encabeza el torneo a nivel colectivo en OPS (.713), promedio (.287), slugging (.397) y está empatado por el liderato en jonrones (3).
En ese sentido, Joey Meneses ha tomado el mayor protagonismo por la tropa de Benjamín Gil. El toletero, firmado con los Medias Rojas, lleva línea de .474/.500/.737 con dos dobles, un cuadrangular y cinco empujadas. A Meneses le pisan los talones Ramiro Peña. El infielder veterano se perdió el primer partido del evento por inconvenientes de logística, pero en las cuatro victorias seguidas de los Tomateros, lleva .400/.500/.600 con par de dobles y un bambinazo en su primer Clásico Caribeño.
“Hemos podido mantener el ritmo”, dijo Gil, cuyos pupilos perdieron por la mínima en su primer choque del torneo ante los Toros del Este (República Dominicana) el sábado y, desde entonces, han ganado cuatro al hilo con un total de 21 carreras anotadas. “(Los bateadores) han podido seguir teniendo buenos turnos. Todos los integrantes nuevos del equipo han aportado. Todos han bateado muy bien. Hemos sido muy consistentes en cuanto a nuestros turnos al bat”.
El abridor de los Tomateros el jueves será el estadounidense Zack Dodson, quien tiró una entrada en blanco ante los Astronautas de Chiquirí (Panamá) el lunes en segundo triunfo de los mexicanos en San Juan.
CARDENALES, LISTOS PARA SEGUIR CON LA BATALLA
Para los Cardenales y, para Venezuela en sentido general, nada ha sido fácil en la temporada 2019-20. Con la prohibición durante gran parte de la campaña de jugadores afiliados con equipos de MLB para participar en la Liga Venezolana de Béisbol Profesional, además de un camino nada fácil hacia el título de la liga para la escuadra de Barquisimeto, los Cardenales han perseverado todo el tiempo para colocarse a dos victorias de proclamarse campeones de la Serie del Caribe.
“Mucha adversidad, así como en la liga, y se sacó adelante”, dijo el manager de los Cardenales, Luis Ugueto. “Estos muchachos se han portado como unos guerreros”.
El mayor obstáculo para los Cardenales llegando a esta Serie del Caribe fue el hecho de sustituir a más de la mitad del roster que ganó el campeonato en Venezuela, por diversos motivos burocráticos. Pero los refuerzos han dado la cara, al igual que los mismos jugadores del equipo de Lara.
Con aportes claves de Alí Castillo .400/.471/.467 y Gorkys Hernández (tres empujadas), entre otros, la ofensiva de Venezuela ha hecho lo suficiente para apoyar un pitcheo colectivo que permitió 15 vueltas (13 limpias) en sus cinco partidos de la primera fase, con efectividad colectiva de 2.54.
“A salir a batallar, a jugar el juego que hemos venido jugando”, dijo Ugueto.
El abridor señalado para los Cardenales será el estadounidense Logan Darnell. El sábado en el primer partido de Venezuela contra los Vaqueros de Montería (Colombia), el zurdo tiró 5.0 entradas como abridor, permitiendo cuatro hits y tres carreras (dos limpias). Ponchó a tres bateadores y dio dos bases por bolas.
En el choque de la ronda clasificatoria entre México y Venezuela el martes, Meneses dio cuadrangular y empujó cuatro carreras para ayudar a los Tomateros a vencer a los Cardenales por 7-6.
El ganador de este segundo encuentro entre ambos equipos se medirá en la gran final del viernes con el que salga airoso de la segunda semifinal del jueves entre los Toros dominicanos y los Cangrejeros de Santurce (Puerto Rico).