El capitán medita irse al fútbol chino después de un roce con Florentino Pérez, pero por ahora todas las partes entienden que la situación es salvable.
Estalló en Real Madrid un conflicto con el que prácticamente nadie contaba. Después de un roce con Florentino Pérez, el capitán Sergio Ramos estaría meditando dejar el club después de catorce temporadas completas, para irse al fútbol chino.
El jugador se reunió en las últimas fechas tanto con Zidane como con el presidente del club. En dichas reuniones, expresó que tenía dudas sobre su continuidad, dibujando un escenario con el que nadie contaba a priori: su salida inmediata.
En el fondo de esta cuestión subyacen dos condicionantes. El primero de todos es la discusión que surgió entre Sergio Ramos y Florentino Pérez en el vestuario del Santiago Bernabéu una vez se consumó la eliminación de la Champions League a manos de Ajax. Una discusión subida de tono, con las pulsaciones al rojo vivo, y en la que hubo reproches directos.
El otro condicionante que subyace es el contrato de Sergio Ramos, que termina en 2021. Según la política deportiva de Real Madrid, que no quiere dejar que sus jugadores entren en el último año de contrato sin haber atado antes su continuidad, este es el momento de la renovación.
Sin embargo, no es menos cierto que el zaguero tiene 33 años y, aunque se encuentra en plena forma, cuando finalice su contrato actual tendrá ya 35. Una edad a la que pocos jugadores llegan vistiendo todavía la casaca merengue. Cristiano Ronaldo, sin ir más lejos, dejó el club con 33 años; Iker Casillas tenía 34 cuando se despidió; y Raúl González también tenía 33.
Naturalmente, estos dos condicionantes, tanto contractuales como personales, influyen directamente tanto en los planes de futuro de Sergio Ramos como de Real Madrid. Sin embargo, tanto por un lado como por otro consideran que la situación actual de tensión no es insalvable. En el fondo, al capitán blanco le gustaría quedarse en el club para poder liderar un proyecto deportivo acorde a su legado en los últimos años. Y por otra parte, en el club blanco, desde el cuerpo técnico hasta la directiva, no ven a Sergio Ramos saliendo, mucho menos a China.
Así las cosas, la situación recuerda mucho a lo vivido en 2015. Entonces el Madrid también había vivido una temporada sin títulos que acabó con la destitución de Carlo Ancelotti y con varios roces por el devenir del curso entre presidente y Sergio Ramos. El jugador también estaba a dos años de acabar su contrato y hubo muchas informaciones circulando acerca de una posible salida, en aquel momento a Manchester United.
Entonces todo se resolvió con la renovación del defensor por tres temporadas más con una notable subida de sueldo. En aquel momento incluso se celebró un acto por su renovación que sirvió para escenificar la química con Florentino Pérez.
Esta temporada, sin títulos y en un punto clave en la carrera de Sergio Ramos, se repiten muchos de los patrones de hace cuatro años. Para saber si acaba de la misma manera todavía habrá que esperar un poco más… Aún restan semanas de conversaciones entre todas las partes para que llegue a buen puerto este entuerto actual. Como muy tarde, eso sí, presidente y capitán se verán las caras a mediados de julio, cuando Real Madrid vuelva al trabajo de pretemporada.