El Barcelona le da la vuelta a un 2-0 con una remontada de campeonato. Los de Hansi Flick, con esta victoria se ponen líderes de nuevo con 60 puntos. Igualados con el Real Madrid. Enfrente, un Atlético de Madrid dolido, que se queda atrás como 3º con 56.
El Barça asestó un gran golpe en la Liga. La remontada de los de Hansi Flick en el estadio rojiblanco fue de las que hacen época y de las que no dejan ninguna duda de que este equipo tiene madera de campeón, que nada le doblega y que puede con todo. Incluso con un 2-0 adverso a 20 minutos para el final. Increíble reacción de un equipo del que deben estar muy orgullosos, y con motivos, todos los culés.
Guion de partido previsible con el Barça monopolizando el dominio del balón y los de Simeone, agazapados en busca de una contra y tratando de encender a su grada con simulaciones, como la de Giuliano, y el ‘marcaje’ con lupa a De Burgos Bengoechea. La táctica les funcionó mejor a los locales en los primeros 45 minutos, pues a los de Hansi Flick les faltó imprimir un ritmo más rápido al juego y tener las ideas más claras en la construcción.
Y eso que apareció Pedri para romper el tedio antes del descanso con un gran pase en profundidad a Lewandowski, pero el zurdazo del polaco tocó en el travesaño. En cambio, en la otra área sí picó la ‘Araña’. Contra rapidísima iniciada por Griezmann, desajuste defensivo con Koundé e Iñigo saliendo en la foto, y gol de Julián Álvarez a pase de Giuliano para certificar una máxima del fútbol: quien perdona, la paga.
Reacción de campeón
Lamine volvió a ponerse al equipo a sus espaldas en el arranque de la segunda mitad. Su disparo seco y raso salió rozando el palo. El Barça sabía a lo que atenerse, pero le costaba muchísimo encontrar soluciones sobre el terreno y Flick se decidió a mover ficha pasada la hora de juego con la entrada de Eric Garcia y Ferran Torres. El ‘Tiburón’ volvió a ser decisivo en su centenario liguero con la camiseta azulgrana.
Pero antes, mucho que contar. En el otro bando, el colchonero, ya hacía minutos que había entrado Sorloth y el noruego es garantía de gol contra al Barça. Le marcó por quinto partido consecutivo. De nuevo una contra, de nuevo una línea mal tirada y gol con acompañado por polémica por unas clarísimas manos previas de De Paul.
Los jugadores del Barça canalizaron la rabia de la mejor forma posible: con juego y goles. Fue providencial el de Lewandowski tras recibir un gran pase de Iñigo. El polaco tuvo mucha clase en el control y en el disparo. Como la que exhibió Raphinha minutos después con un centro medido cabeceado por el ‘Tiburón’ al fondo de la red. En 6 minutos, los que van del 72 al 78, el Barça había igualado un marcador muy desfavorable.
Para entrar en un auténtico ‘cara o cruz’ en los minutos finales, con ocasiones por ambos lados. El Barça tenía la experiencia negativa de los añadidos en los dos partidos de Montjuïc, pero el equipo de Hansi Flick está hecho de otra pasta y en el 91′ marcó Lamine, con la ‘colaboración’ de Reinildo un gol que vale media Liga. Y que fue rubricado por el doblete de Ferran y el 2-4 definitivo. Sencillamente, brutal.