Voraz ofensiva de 17 hits y asfixiante relevo que no concedió libertades desde el tercer inning, constituyeron los dos puntos de apoyo, en los cuales Águilas del Zulia edificó su triunfo 7-2, en el primer juego de la Serie del Comodín contra Tigres de Aragua en Maracay.
Zulia ganó por primera vez en el Estadio José Pérez Colmenares y mañana intentará barrer a Tigres a domicilio para ganar el último boleto al Round Robin semifinal. Objetivo que también inspirará a Tigres, que ahora al igual que Águilas, no tiene mañana. Aunque la frase es harto manida, no deja de ser reveladora para ambos clubes, que irán a un verdadero juego de vida o muerte, desde las 5:00 de la tarde y en el mismo escenario de la Ciudad Jardín.
El mexicano Hazahel Quijada y el criollo Jonathan Vargas, pretendieron un duelo de zurdos, que no pudo ir más allá del segundo inning. Ambos dejaron temprano la resolución del juego en los brazos del bullpen. Aquí Zulia sacó ventaja, pues sus relevistas colgaron cinco ceros y estuvieron muy distantes del descontrol marcado por Quijada, quien en 1.1 innings regaló tres bases por bolas. Los relevistas rapaces apenas obsequiaron dos en el resto del juego. En total, el pitcheo aguilucho recibió nueve imparables y el único daño se registró en el segundo acto, con dos carreras contra el zurdo azteca. Gregory Infante (1-0), primer relevista por Águilas se apuntó la victoria. Luego vendrían cinco brazos más a completar la tarea.
Luis Rijo (0-1), cuarto de 10 lanzadores utilizados por el mánager Buddy Bailey, fue castigado con la derrota.
El juego tuvo duración de 3 horas 49 minutos y solo se registró un error, el cual correspondió al inicialista dominicano Yermín Mercedes, debutante en este cotejo.
Zulia inauguró la pizarra en el propio primer inning. Alí Castillo abrió con sencillo por la antesala. Ángel Reyes lo llevó a esa base con hit al centro. Rougned Odor respondió con imparable impulsor a la izquierda, aprovechado por Castillo para colocar el 1-0.
Aragua reaccionó en el cierre del segundo acto para explotar al abridor Quijada e irse arriba 2-1. Leobaldo Cabrera inició con boleto. Gersel Pitre, en intento de sacrificio, consiguió infield hit por el montículo. El piloto Bailey insistió con el toque y le salió bien la estrategia para avanzar a los corredores y ubicarlos en posición anotadora. Quijada abandonó la escena y fue relevado por Gregory Infante, quien permitió imparable de Yonathan Mendoza al centro para fletar a la pareja de Cabrera y Pitre con el empate y la ventaja.
Racimo de cuatro anotaciones en la parte alta del cuarto, puso en ventaja 5-2 a Águilas. Ante el relevista Luis Rijo. Luego de un out y con Eduardo Torrealba por selección en la inicial, el corredor salió al robo y logró el objetivo. Alí Castillo logró hit de piernas por la grama corta para llevar a Torrealba a la antesala, desde donde llegaría al plato con sencillo de José Pirela al centro. Acto seguido, Rijo concedió boleto a Ángel Reyes y con las bases llenas, el zurdo Anderson Severino entró a relevar para caminar a Odor y forzar la carrera de Castillo. Entonces Freddy Galvis coronaría el rally con incogible a la derecha, batazo que puso en la goma a Pirela y a Reyes.
En la azotea del sexto episodio y frente al relevista derecho Bruce Rondón, Odor se llevó la cerca derecha para ampliar a 6-2 la ventaja zuliana.
Después de dos outs, en el octavo capítulo, Freddy Galvis, Alex Romero y Jesús Sucre combinaron sencillos para que en los spikes del primero llegara el 7-2 y ante el relevista Claudio Custodio.
Eliberson Castellano, tercer relevista zuliano, relevó en blanco por 2.1 innings y mantuvo a salvo la ventaja de su club. Terminado el encuentro, conversó con el circuito radial de Águilas.
“Salí a dar el todo por mi club. Tenemos las herramientas para avanzar al Round Robin. Me enfoqué por sacar los outs y pude ayudar al equipo”.
Odor, segunda base que ligó de 5-3 con jonrón, boleto, anotada y dos impulsadas, también dio sus impresiones por los mismos micrófonos y por los del canal televisivo IVC.
“Contento por los triunfos que hemos hilvanado. Tenemos buena química y mañana sábado buscaremos el triunfo que nos conduzca a la siguiente ronda. En los últimos dos juegos me he sentido mejor en el plato. Con el coach de bateo he ajustado aspectos que no estaban bien. Esta vez me sirvieron una slider y pude conectar el jonrón. Esperaba un buen pitcheo y se dio. Los viajes han sido muy extenuantes, pero el equipo está muy unido y eso nos da el ánimo necesario para hacer bien las cosas”.