Los equipos participantes en competiciones europeas, como la Liga de Campeones o la Liga Europa que se reanudará a partir de este miércoles, tendrán que superar tests PCR de la COVID-19 dos o tres días antes de cada encuentro y antes de viajar, según el protocolo que ha hecho público hoy la UEFA.
Las normas para hacer frente a la COVID-19 en las competiciones que organiza la asociación europea, elaboradas por un grupo de médicos entre los que está el croata Niko Mihic (jefe de los servicios médicos del Real Madrid), se aplicarán tanto a los partidos de clubes como a los de selecciones.
En él se indica que los equipos visitantes tendrán que someterse a un test PCR antes de salir de su país, dos o tres días antes del partido, cuyos resultados deben ser recibidos antes de la salida del equipo hacia la ciudad del encuentro.
Si es requerido por las autoridades locales, será necesaria una nueva prueba adicional al equipo visitante el día antes del partido a la llegada de la ciudad que acoge el encuentro. En ese caso, los resultados deben estar disponibles seis horas antes del inicio de partido.
El equipo de casa tendrá que someterse a un test uno o dos días antes del partido, de manera que los resultados estén disponibles al menos seis horas antes del inicio del encuentro.
Los árbitros y oficiales de la UEFA deberán someterse a pruebas de la misma manera antes de viajar.
Si algún miembro de las plantillas tiene un resultado positivo, el proveedor tendrá que informar «inmediatamente» a las autoridades locales. Ninguna persona que haya tenido un positivo puede viajar al lugar del partido o formar parte del encuentro.
Para las competiciones que se terminan de la temporada 2019-20, los jugadores que ya hayan dado algún positivo de COVID-19 tendrán que someterse a exámenes médicos que confirmen que han superado la enfermedad.
Si cualquier persona involucrada en los partidos desarrolla síntomas compatibles con la COVID-19, tendrá que aislarse «inmediatamente» y contactar con las autoridades sanitarias locales.
Los jugadores tendrán que utilizar mascarillas durante los viajes, mantener la distancia social con cualquier persona externa a la plantilla y cuerpo técnico, usar gel hidroalcohólico y requerir que los aviones estén totalmente desinfectados en los vuelos antes de los traslados.
Cuando sea posible, el vuelo de vuelta tendrá lugar inmediatamente después del partido.
La delegación oficial que acompañe al equipo tiene que reducirse «al mínimo» según la UEFA, con un máximo de 10 personas que deberán viajar por separado de las plantillas, llevar mascarillas y no podrán visitar todas las zonas del estadio.
Los autobuses de los equipos tendrán que ser desinfectados poco antes de recoger a los conjuntos y se recomienda que el conductor se someta a una prueba, así como que utilice mascarilla y mantenga la distancia social de dos metros.
Los hoteles de los equipos tendrán que tener áreas privadas para las comidas de la plantilla y rutas exclusivas para su paso, así como habitaciones individuales, desinfección de las zonas utilizadas por el equipo y que la comida sea servida preferentemente por el propio personal del club con el mínimo número de personas del hotel.
En los estadios, cualquier persona que entre debe someterse a un control de temperatura, además de rellenar un formulario con información epidemiológica, desinfectar sus manos, llevar mascarilla y mantener la distancia social.
Los estadios contarán con cuatro zonas (zona 1 o de equipos, zona 2 de alrededores del césped, zona 3 tribunas e interior del estadio, y zona 4, correspondiente al exterior del estadio) que serán desinfectadas en periodos diferentes y cuyo acceso estará regulado.
Los equipos llegarán a los estadios en momentos separados para evitar que se mezclen en los pasillos, con el mínimo personal en el estadio manteniendo la distancia social.
Sustitutos y técnicos
Los sustitutos y los técnicos estarán a un metro del banquillo, para lo cual se podrán extender los banquillos o utilizar los asientos adyacentes en las tribunas si son accesibles. Los jugadores de cada equipo calentarán en zonas separadas, si no es posible tratarán de mantener la distancia máxima posible.
Para los controles antidopaje habrá dos salas de espera separadas para mantener la distancia social.
Al inicio de los encuentros, los dos equipos no coincidirán en el túnel de vestuarios para evitar congestión en ese área, por lo que saldrán directamente al césped y tendrán que mantener al menos un metro de distancia entre cada uno de los jugadores durante la ceremonia de las alineaciones.
En el inicio de los encuentros no se organizarán actividades adicionales: no habrá niños que acompañen a los jugadores, ni mascotas, bailes ni músicos. Tampoco habrá apretones de manos entre los equipos o con los árbitros, aunque sí se producirá el sorteo inicial con una moneda y se podrán intercambiar banderines.
Los jugadores y el cuerpo técnico en el banquillo no estarán obligados a llevar mascarillas, pero deben mantener la distancia social durante todo el tiempo.
Las conferencias de prensa previas y posteriores a los partidos se desarrollarán de forma habitual manteniendo la distancia social y podrán contar con un sistema de videoconferencia. No habrá zonas mixtas tras el partido, aunque sí se mantendrán las entrevistas postpartido sobre el césped, con separación de dos metros con el reportero y el cámara. EFE