El ex dirigente norteamericano fue quien confesó ante la justicia de su país cómo funcionaban los mecanismos de sobornos entre las confederaciones regionales y las empresas de marketing
El estadounidense Chuck Blazer, ex dirigente de la FIFA, fue suspendido de por vida de todas las actividades relacionadas con el fútbol profesional por su implicación en los escándalos de corrupción.
«Blazer cometió muchos actos de mala conducta de forma continuada y repetida durante su mandato como responsable en varios puestos de alto nivel en la FIFA y la CONCACAF», especialmente aceptando «pagos ilegales», dijo el jueves en un comunicado el organismo.
Blazer, antiguo aliado del presidente dimisionario de la FIFA, Sepp Blatter, «desempeñó un papel clave» en el hecho de «proponer, aceptar o realizar pagos ilegales, sobornos o comisiones», consideró la comisión de ética de la FIFA, presidida por el alemán Hans-Joachim Eckert.
El ex dirigente de la FIFA fue un informador clave en el escándalo de corrupción del organismo. Empezó a cooperar con las autoridades estadounidenses en diciembre de 2011, cuando era miembro del comité ejecutivo de la organización.
Blazer, que fue secretario general de la Concacaf entre 1990 y 2011 y miembro del comité ejecutivo de la FIFA entre 1997 y abril de 2013, colaboró durante cerca de 16 meses con el FBI.
El millonario estadounidense, que padece cáncer, está detrás de las revelaciones que sumieron a la FIFA en la crisis más grave de su historia, provocando la dimisión de su presidente Blatter.
El pasado 27 de mayo, las autoridades judiciales norteamericanas inculparon a 14 responsables de la FIFA y de empresas afiliadas acusados de corrupción.
La policía suiza detuvo a siete responsables de la organización ese mismo día en Zúrich (Suiza).
Además de Blazer, otras tres personas se declararon culpables, incluidos dos hijos de Jack Warner, antiguo vicepresidente de la Concacaf y miembro del comité ejecutivo de la FIFA, y una de las personas detenidas en Zúrich.
AFP