Gerard Piqué tendrá que reembolsar 2,1 millones de euros a la Hacienda española después de confirmarse su condena por fraude fiscal en la tributación de sus derechos de imagen, según señaló una fuente judicial del país ibérico.
La decisión que se fijó el 13 de mayo en la Audiencia Nacional cuando se rechazó el recurso presentado por el defensor catalán contra la sentencia de un tribunal administrativo en 2016 que le obligaba a pagar 1,5 millones de euros de impuestos atrasados y una multa de 600.000 euros.
Este tribunal concluyó entonces que el jugador del Barcelona había «simulado» la cesión de sus derechos de imagen a su sociedad Kerad Project con tal de pagar menos impuestos en los años 2008, 2009 y 2010.
«La omisión de la declaración en España de tales rendimientos fue, al menos, culposa o negligente», señaló la Audiencia Nacional en la decisión de mayo. Por lo tanto, Gerard Piqué, ganador del Mundial 2010 y la Eurocopa 2012 con el seleccionado que por aquel entonces lideraba Vicente Del Bosque, todavía puede apelar ante el Tribunal Supremo.
Esta decisión llega un mes después de que la pareja del futbolista, la cantante colombiana Shakira, compareciera ante un tribunal español que la investiga por una presunta evasión correspondiente a los 14,5 millones de euros en concepto de los impuestos que debía abonar entre 2012 y 2014, ya que la artista internacional tiene su domicilio fiscal en un barrio de Cataluña.